Una auditoría del Principado insta a reordenar todo el sector público cultural de Asturias

Esa recomendación llega después de otra de carácter general que tampoco es menor ni baladí: «La Administración debe acometer la revisión y actualización de su normativa en materia de régimen jurídico, régimen presupuestario y sector público, visto, entre otros, el análisis realizado respecto al organismo público OSPA», dice el texto firmado por la jefa de la Inspección General de Servicios. Se añade incluso que la administración debe hacer un ejercicio efectivo de las funciones de seguimiento y asistencia de las entidades públicas evitando su aislamiento. Añade que se puede valorar elaborar protocolos para su control.

Llega esta voz de alerta al hilo de una auditoría que denuncia la mala situación de la orquesta: «La OSPA permanece dimensionada conforme a las necesidades identificadas en el momento de su formación a principios de los años 90, existiendo a día de hoy una infradotación manifiesta de recursos financieros y humanos, desde el punto de vista cuantitativo y cualitativo, probablemente además superpuesta a una inadecuación sobrevenida de su forma jurídica que viene imposibilitando el ejercicio de sus funciones y la adaptación de su modelo de gestión a los sucesivos cambios normativos».

Se entra en detalles laborales y se reclama para la OSPA a través de este documento «la elaboración y aprobación de un Reglamento de régimen interior (...) que regule su organización y funcionamiento interno, cuya aprobación corresponde al Consejo de Gobierno». Alude también a la necesidad de establecer un código de buenas prácticas, a la negociación de un convenio colectivo, a convocar nuevas plazas de instrumentistas y a poner fin a la temporalidad en los contratos. «Debe reducirse la contratación temporal al mínimo indispensable, tanto en lo relativo a los contratos de artistas (sólo para programas determinados y no excediendo del plazo legalmente establecido) como a los contratos de interinidad por sustitución o vacante, promoviendo con celeridad en este último caso, la convocatoria de los correspondientes procesos selectivos para la cobertura de las plazas».

También se insta a la creación de una Comisión Artística y a la búsqueda de vías de financiación privadas. Se recomienda, pues, impulsar la participación de las personas públicas y privadas, por las vías del mecenazgo, patrocinio.

A lo largo de 57 páginas se analiza el devenir de un orquesta siempre metida en alguna polémica y cuya gerente, Ana Mateo, fue destituida en noviembre. El documento habla también de las funciones de ese cargo y se proponen cambios en la estructura organizativa bajo su dirección, con la incorporación de coordinadores de apoyo jurídico, técnico y un auxiliar de producción musical. También se insta a que el director titular de la orquesta, Nuno Coelho, tenga voz y voto en el Consejo Rector.