«La filosofía de Gustavo Bueno es inmortal»

Con una emotiva ceremonia "familiar e institucional" que ha durado algo más de una hora, Santo Domingo de La Calzada ha despedido al filósofo Gustavo Bueno, que falleció este domingo a los 91 años en su casa de Niembro, en Llanes. El acto ha tenido lugar en el salón de Plenos del Consistorio riojano, donde este mediodía se abrió la capilla ardiente por la que han pasado centenares de personas que han dado su último adiós al "filósofo del siglo", como lo ha calificado el secretario de la Fundación que lleva su nombre, Sergio López.

Arropados por las eternas composicones de Bach, las favoritas del filósofo, en la ceremonia han intervenido sus hijos Gustavo, Carmen y Álvaro, sus nietos Carlos, Jimena, Lidia y Gustavo y su hermano Fernando. Su hijo Gustavo hizo un llamamiento a "ver con alegría" la despedida de su padre, que ha fallecido "por razones biológicas", pero que "vivió una vida plena y su obra sigue viva".

Recordó que su padre fue el creador del "materialismo filosófico", una corriente que "no pretendía crear, pero que fue saliendo y ahora ya está fuera de él, en cientos de discípulos y tesis doctorales". "Ahora hay un antes y un después porque el autor principal ya no existe y esta corriente tendrá que seguir con vigor sin su creador", ha afirmado Bueno Sánchez, quien se ha emocionado al explicar que hoy, "en el mismo momento del entierro", en la universidad mexicana de León, en el estado de Guanajuato, se inaugura la Facultad de Filosofía, creada en colaboración con la Fundación Gustavo Bueno. Se trata, ha dicho, de "una circunstancia simbólica porque el sistema filosófico cobra vida nueva en la nueva España", con lo que "la alegría es mayor, aunque estemos en la tristeza".

Ha calificado de "ridículo" y de "puro subjetivismo sensiblero" "demostrar tristeza, sino alegría" porque "mis padres han tenido vidas plenas" -en alusión a su madre, Carmen Sánchez Revilla, quien falleció hace dos días- y porque "la vida de mi padre sigue viva" y "se va mantener gracias a las Universidades de Oviedo y La Rioja".

Carmen, por su parte, presentó a los intervinientes y Álvaro ha diferenciado entre la muerte del individuo, algo biológico, y la de la persona, que está relacionada con su obra. Estos dos hijos, junto a uno de sus cinco nietos, han leído varios pasajes de la obra de Gustavo Bueno 'El sentido de la vida', mientras que otros tres nietos han realizado "ofrendas" a su abuelo, todas con momentos de emoción. Uno de ellos ha interpretado al piano una parte de la banda sonora de la película 'Gladiator', que muchas veces tocaba con su abuelo, ha dicho; otra ha recitado una de las poesías favoritas del filósofo; y una tercera ha tocado al violín una pieza de Bach. Fernando, por su parte, leyó una "elegía a la muerte" de sus hermanos, en alusión también a la esposa del filósofo.

Un proyecto a consolidar

El alcalde de Santo Domingo de la Calzada, Agustín García Metola, por su parte, tomó la palabra para comprometerse a "consolidar el proyecto" del Instituto de Investigación Filosófica impulsado por la Fundación Gustavo Bueno, la Universidad y el Ayuntamiento en un acto en el que intervino también el secretario de la Fundación Gustavo Bueno, Sergio López, quien puso de relieve que "la filosofía de Gustavo Bueno es inmortal".

Al acto han asistido personalidades como el rector de la Universidad de Oviedo, Santiago García Granda, y el presidente de La Rioja, José Ignacio Ceniceros, quien ha destacado que Bueno era "uno de los mejores embajadores de La Rioja y un orgullo para todos los riojanos". Ha afirmado que, "aunque desde joven se afincó en Asturias, siempre se sintió riojano y así lo dejaba patente allá donde estuviera".

Tras la ceremonia, el féretro de Gustavo Bueno ha sido portado a hombros por sus hijos y nietos hasta la plaza del Ayuntamiento, donde la banda de música municipal interpretó el himno local. Después, fue llevado al cementerio, donde ya reposa junto a su esposa Carmen, fallecida solo dos días antes.

Termina así uno de los días más tristes de Santo Domingo de la Calzada, que en un Pleno extraordinario celebrado este mediodía ha declarado dos días de luto oficial por el fallecimiento de Bueno, que en 1965 logró la Cátedra de Filosofía de la Universidad de Oviedo, de la que fue nombrado profesor emérito honorario en 1998.

Después, se abrió al público la capilla ardiente. Familiares, amigos, vecinos, miembros de la Fundación Gustavo Bueno y de la corporación municipal, algunos discípulos del filósofo y el consejero de Educación del Gobierno de La Rioja, Abel Bayo, han sido los primeros en visitarla.

Gustavo Bueno fue finalista del premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades en 1989 y 1990 y recibió, entre otros galardones, la Medalla de La Rioja (1991) y la Medalla de Asturias de Plata (1990). Además, desde 1997, era Hijo Predilecto de su municipio natal.

Entre sus obras figuran "El papel de la Filosofía en el conjunto del Saber" (1970), "Etnología y Utopía" (1971); "Ensayos Materialistas"(1972); "Ensayos sobre las categorías de la Economía Política"(1972); "La Metafísica Presocrática" (1974), "El animal divino. Ensayo de una teoría Materialista de la religión" (1985) y "El mito de la cultura" (1997). A ellas se suman "España frente a Europa" (2000), "Televisión: apariencia y verdad" (2000), "Telebasura y democracia" (2002), "El mito de la izquierda" (2003), "El mito de la derecha" (2008), "Zapatero y el pensamiento de Alicia" (2006) y "La fe del ateo" (2007).

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