«Nos la estamos jugando si no controlamos la tecnología»

El presidente de los cursos, Benigno Pendás García, reconoció que «vivimos tiempos interesantes que habrá que afrontar» y consideró que España tiene una sociedad «dispuesta a ello».

Pendás mostró su satisfacción por mantener «este curso, que seguirá siendo un clásico» y a los de La Granda los calificó en su conjunto como «una aventura intelectual que continuará siendo un éxito con la ayuda de todos».

La participación de José Molero, catedrático emérito de Economía de la Universidad Complutense de Madrid contó con la gran aceptación del público asistente. Guiados por su presencia, los asistentes debatieron sobre innovación, competitividad y futuro, con especial atención a la soberanía tecnológica. «Se trata de saber si se puede plantear el futuro industrial de un país cuando no se controla una parte fundamental de la tecnología que se necesita», declaró a este periódico.

Aunque nació fuera del Principado, Molero se declaró «asturiano convencido» e hizo hincapié en que esta comunidad «debe participar de este debate por todo su pasado, sobre todo por el pasado industrial». Este economista, que dijo haberse rodeado de amigos que saben mucho para llegar a este curso, manifestó en la presentación del mismo que «si la innovación no está en las empresas, no existe». En este sentido, resaltó que sectores españoles como la construcción y el turismo «tienen demasiado peso y eso nos hace débiles ante las situaciones de crisis».

Para José Molero, la cuestión de la soberanía tecnológica «no es un índice sino un concepto, por lo que es un problema con muchas derivadas, aunque no tenemos un soberonómetro para medir». Lo que sí planteó es «la absoluta necesidad de que las administraciones públicas, europea, española y asturiana, además de las empresas, se enteren de que nos la estamos jugando si no somos capaces de controlar más la tecnología». A su juicio, «así lo hemos visto con la pandemia, que nos faltaba de todo».

En declaraciones a este periódico, añadió que «no se puede dar una receta» para favorecer este control, sino que «hay que conservar lo que se tiene e intentar no quedar desfasado respecto a las nuevas tecnologías».

Sobre si las prisas son buenas o innecesarias para resolver este asunto tecnológico, manifestó que «esto no es una urgencia, es algo sobre lo que se viene discutiendo desde hace diez años», aunque la pandemia y el conflicto de Ucrania «lo ponen muy crudo», pero «no traemos este tema por ello a La Granda, aunque sí que pone de manifiesto la crudeza de no tener, por ejemplo, el control de los chips, ya que Europa no los fabrica». Para hacer frente a esta situación, en su opinión, «se necesita voluntad y decisión política, de planificación y después el dinero, porque si empezamos sólo con el dinero, hasta puede ser malo porque hay que tener claro para qué se va a utilizar».

José Molero consideró que España «no puede ser autónoma en todas sus tecnologías, pero, «entre la autarquía y depender demasiado de todo, como las mascarillas, hay un escalonamiento que cada país es el que tiene que buscar», manifestó.