El yihadista detenido en Avilés pasaba desapercibido en su comunidad

Un vecino que pasaba desapercibido. Así es el retrato que los residentes en el edificio de Marcos del Torniello dan de la persona que el pasado martes fue detenida tras un importante despliegue de la Policía Nacional para detenerlo por ser un presunto yihadista que se había radicalizado y podría cometer un acto terrorista.

Las viviendas del edificio donde se realizó la operación se reparten en dos escaleras. La residencia del presunto yihadista se encontraba en el ala izquierda. Los vecinos de la derecha consultados por este diario no habían oído nada de la operación y algunos, incluso, fueron alertados por sus familiares. «Me llamó mi hijo porque lo vio en el periódico para ver si estaba bien. Le pregunté que sí y me informó de lo que pasaba», relató un vecino.

En la parte del bloque donde residía con su novia la situación es similar. Ayer por la mañana, había quien no se había enterado de nada, salvo por el periódico. De hecho, ningún vecino con los que pudo hablar este diario identificaba al presunto terrorista. Nadie con la imagen que se asocia a los islamistas como tipos barbudos.

La detención del presunto yihadista por parte de la Policía Nacional motivó que ayer la portavoz de Vox en la Junta General del Principado, Carolina López, anunciase que su formación presentará una «batería de preguntas en la Junta General del Principado para conocer las operaciones realizadas en Asturias contra el yihadismo».

Desde el partido vinculan en la nota de prensa el auge del yihadismo con la inmigración legal, si bien Hassan, el nombre atribuido por la Policía Nacional al detenido, se encontraba en España de manera legal, ya que había trabajado en la construcción, aunque actualmente se encontraba en paro. La legislación española impide la contratación de extranjeros sin permiso de residencia, por lo que la historia laboral del detenido evidencia que tenía permiso de residencia.

Según la nota de prensa de la Policía Nacional, la intervención policial se produjo el pasado martes por la noche. Fue puesto a disposición de la Audiencia Nacional que el pasado jueves decretaba el ingreso en prisión.

Las investigaciones policiales comenzaron a principios de año, cuando se detectaron comportamientos radicales de Hassan. A través de redes sociales lanzaba proclamas proyihadistas, lo que llevó a realizarle un seguimiento estrecho comprobando que se había autoadoctrinado en la ideología yihadista. Según explica la Policía Nacional, el hombre, nacido en Marruecos en 1983, había generado un profundo odio hacia la cultura occidental.

En sus mensajes lanzaba cada vez con más frecuencias proclamas violentas y también expresaba ideas suicidas. Todo ello acabó desembocando una operación policial para terminar con lo que los agentes denominaron «una amenaza contra la seguridad nacional» por el riesgo de una acción suicida.

En la operación de Avilés se registraron dos viviendas, además de incautar diferente material informático que será analizado por los expertos de la Policía Nacional. Al tiempo que se realizó este arresto, en Guipúzcoa también se detuvo a otro presunto terrorista yihadista con un perfil similar a la intervención que hubo en la ciudad.

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