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B. PINO
AVILÉS.
Miércoles, 28 de octubre 2020, 00:50
Ante la evolución de las restricciones horarias y a la movilidad y sus consecuencias para el sector hotelero, hostelero y restaurador, la Unión de Comerciantes de Avilés y Comarca (Ucayc), a través de su gerente, José Antonio Álvarez, reclamó ayer a las autoridades la urgente definición de medidas para aliviar la presión sobre los negocios afectados. «La forma de que este sector, uno de los más damnificados, continúe es que se implementen ayudas, precisamente, por lo que está ocurriendo, que es por imperativo legal. Al mermar el horario de trabajo, la administración tiene que compensar de alguna manera esas pérdidas», aseguró.
En ese sentido, Álvarez puso sobre la mesa la necesidad de concretar un plan regional para el sector, que incluya tanto a los hosteleros afectados, representados por la Federación Asturiana de Empresarios (FADE), como a la administración y a los sindicatos mayoritarios, por medio de las mesas de concertación. «Esa mesa debería analizar y estudiar diferentes propuestas a implantar en los sectores afectados, pero allí donde aprieta, más habrá que articular medidas puente hasta que la situación regrese a una normalidad que nos permita a todos abrir con garantías».
En opinión del gerente de la Ucayc, algunas de las actuaciones conjuntas que servirían de balsa salvavidas al sector serían unas ayudas directas para compensar las pérdidas en el horario de cierre forzoso, la posibilidad de que los ERTE se prorroguen, adecuar la cuota de autónomos al tiempo efectivamente trabajado, o la congelación de tasas e impuestos municipales cuando a los establecimientos no les sea posible dar el servicio.
Finalmente, y en referencia a la protesta protagonizada el lunes por una quincena de hosteleros avilesinos, señaló que «al sector no se le puede demonizar; la responsabilidad tiene que ser individual; así no transmitiremos el virus».
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