FERNANDO DEL BUSTO
AVILÉS.
Jueves, 19 de septiembre 2019, 00:48
La sección sindical de Comisiones Obreras en Saint-Gobain Avilés reclamó ayer conocer el plan industrial de la multinacional francesa para la planta avilesina después de conocerse que la producción se reducirá hasta finales de año en otros 200.000 parabrisas. De esta manera, las ... instalaciones de La Maruca cerrarán el ejercicio con 1.200.000 parabrisas fabricados, en el rango más bajo de su rentabilidad, ya que la dirección de Saint-Gobain siempre ha explicado que la planta avilesina necesita una producción de entre 1.400.000 y 1.500.000 para ser rentable.
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En la medida en que se baja de 1.400.000, son necesarias la adopción de medidas de control del gasto como las que se vienen aplicando en la actualidad y que se traducen en ajustes en el personal de contratas donde alguna auxiliar ya ha comenzado a aplicar un expediente de regulación temporal de empleo, además de que se producen despidos y se limita la contratación de personal. La dirección ya ha avanzó que la habitual parada que se realiza en diciembre se adelantará este año al día 16, cuando en otros ejercicios había sido en las inmediaciones del 20 o 22.
La dirección ha explicado el ajuste en el calendario de actividad por las incertidumbres del mercado, queque también se han notado en otras empresas como ArcelorMittal. Las advertencias de los analistas sobre una inminente recesión y la incertidumbre sobre el brexit provocan una desaceleración en la economía y el sector del automóvil comienza a notarla.
Desde la dirección se ha negado la deslocalización de producción hacia Marruecos, donde el emplazamiento de Kenitra cada vez tiene más peso en los planes industriales de la empresa francesa. Sin embargo, las palabras no tranquilizan a Comisiones Obreras, que ve como Sekurit Avilés ha perdido desde el inicio de la crisis económica en 2008 el 55% de su producción.
En este sentido, desde el sindicato mayoritario, que cuenta con diez de los diecisiete delegados del comité, se ha planteado ante la dirección de la fábrica la necesidad de conocer el plan industrial de Saint-Gobain que despeje todas las incertidumbres sobre su actividad.Más aún, cuando la dirección sigue sin aprobar la construcción del nuevo float de la planta de Arbós, en Tarragona, que se encuentra al final de su vida útil y, de hecho, ya debería haber sido renovado. No se puede olvidar que este horno es uno de los principales suministradores de vidrio para el Sekurit avilesino ya que el float de La Maruca produce para Glass, la división de construcción, ya que lanza láminas con un mayor grosor, que no son aptas para convertir en parabrisas.
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Por esta razón, Avilés recibe la materia prima para el Sekurit desde otras plantas europeas y se quiere asegurar una fuente de suministro estable, en el territorio de la Unión Europea y no fuera. A ello se unen otros factores como el cambio en los criterios de asignación de nuevos modelos. A partir de este año, las plantas deberán competir entre ellas para presentar la mejor propuesta con la que Saint-Gobain pujará por ese contrato. La pérdida de rentabilidad se traduce en mayores dificultades para poder aspirar a nuevos modelos y mantener la actividad en la planta avilesina.
En esta situación, desde Comisiones Obreras se ha iniciado una campaña en defensa del nuevo convenio colectivo, vigente para este año y los dos próximos, frente a las críticas que ha venido recibiendo en la fábrica desde la sección sindical de UGT y la Corriente Sindical de Izquierdas. Aunque CSI no cuenta con presencia en el comité, en este mandado se ha formado una sección sindical, fundamentalmente en Glass, que debería debutar en las elecciones sindicales del próximo noviembre. El pasado mayo su secretario general de Asturias, Ignacio Fuster, anunció que Saint-Gobain había planeado el cierre de Avilés y el traslado de la producción a Marruecos para el último cuatrimestre del año, adelantando los planes que tenía en esa línea. Aunque las declaraciones fue rápidamente desmentidas por la compañía y también por el Principado de Asturias, generaron un ambiente tenso en la plantilla.
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En este sentido, desde CC OO se recordó ayer la importancia del convenio «por la estabilidad que aporta para estos tres años y la posibilidad que abre para recuperar carga industrial en Avilés». En esta línea, destacó que en Arbós, con una mayor incertidumbre sobre su futuro que Avilés, la propuesta salió adelante con el apoyo del 80% de la plantilla, una cifra poco frecuente, pero que evidencia que en la planta catalana «tienen interiorizado que se enfrentan a una situación más grave». Además, destacan los contenidos del convenio, donde se establecen subidas salariales con la garantía de que se superará el 0,3% del IPC durante los dos primeros años, y el 0,4% el último, además de mejora de pluses y de tipo social.
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