Saint-Gobain aleja el fantasma del cierre, pero pide «unidad»

El alto directivo realizaba estas declaraciones después de mantener una reunión de trabajo con la alcaldesa de Avilés, Mariví Monteserín. Junto con el concejal de Promoción Económica, Manuel Campa, y el director de Recursos Humanos, Héctor Fernández, abordaron la situación de la empresa. «Son tiempos muy difíciles», reconocía la alcaldesa de Avilés, después del encuentro, «la actual situación está golpeando a todos los sectores y a todas las empresas en un momento u otro. Para salir de la actual situación es necesario que acompañemos a los gestores, que necesitan de tranquilidad y acompañamiento de todos, de la ciudad y de los trabajadores para salir del actual bache y ganar el futuro», antes de destacar la trascendencia de Saint-Gobain para Avilés, tanto en el presente como en el futuro de la ciudad. «Estamos en condiciones de ganar ese futuro porque somos una comarca industrial con todo lo que eso significa», destacó la regidora avilesina.

Para Piqueras, «la tranquilidad» y la «unidad» son elementos claves para superar los momentos actuales. El director general de Sekurit aseguró que la planta de Avilés «no se va a cerrar ni nada por el estilo. Pero la situación es difícil y se debe resolver entre todos para conseguir nuevos proyectos».

Sin embargo, el alto directivo se mantuvo prudente al ser preguntado por la manera de entender esa llamada ante la convocatoria de una huelga indefinida tras el ofrecimiento de un traslado a una trabajadora incorporada a Saint-Gobian por una sentencia judicial.

Piqueras defendió que se trataba «de un asunto puntual», sin entrar en más detalles. La semana pasada, la asamblea de trabajadores aprobaba una convocatoria indefinida con dos días a la semana en febrero y tres desde marzo para lograr la incorporación de la afectada a Saint-Gobain.

Mariví Monteserín también lanzó un mensaje de tranquilidad sobre el conflicto, expresando su confianza de que «se va a resolver. Es importante no contribuir más a una situación de la que sólo nos puede sacar la buena gestión», expresando su confianza en que la situación se resuelva «lo mejor posible para las dos partes».

Mariví Monteserín destacó que la clave fundamental de la actual situación es «la proyección de futuro» de las instalaciones de La Maruca para lo que «necesitan de nuestra colaboración y de nuestro acompañamiento, de todos los actores: las instituciones, de nuestro plan Avilés Innova en el que están los sindicatos y los empresarios y, por supuesto, de los trabajadores, que son quienes más tienen que valorar que tienen un trabajo industrial, con todo lo que eso conlleva».