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Agentes de la brigada judicial de la comisaría de Avilésde la Policía Nacional detuvieron a un avilesino de 44 años que se dedicaba a sustraer joyas de los fallecidos para, posteriormente, venderlas. La sustracción se producía cuando quedaba a solas con los finados en la funeraria donde trabajaba.
La investigación comenzó a mediados del pasado septiembre, cuando se detectó operaciones sospechosas en el mercado de venta de joyas de oro. Eran piezas que por su tipo, diseño e inscripciones no tenían relación con el vendedor. De esta manera comenzaron los trabajos policiales que terminaron con el arresto de un avilesino de 44 años, trabajador de una funeraria y que carecía de antecedentes penales.
El detenido aprovechaba los momentos en los que quedaba a solas con los finados para sustraer las joyas. Además, era la única persona de la funeraria a la que se detectaron ventas de joyas. En la investigación se localizaron siete lotes, con un valor en el mercado de 5500 euros.
La Policía localizó a los familiares de los fallecidos, si bien existen cuatro piezas cuya procedencia aún no ha sido determinadas. Son las que se encuentran en la imagen.
Las personas que las reconozcan pueden contactar con la policía bien en el teléfono 984 012 308 o en el correo electrónico aviles.judicial@policia.es.
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