Una reyerta en mitad de la calle congrega a más de cien personas en Avilés

Tras preguntar a los presentes por lo sucedido, todos ellos niegan su participación en los hechos y aseguran no haber presenciado ninguna pelea, sin poder explicar por qué se habían reunido tal cantidad de personas en un mismo espacio público. Es por ello que los agentes deciden realizar varias batidas por el barrio para asegurarse de que no se suceden más incidentes en otras zonas, no sin antes solicitarle a la muchedumbre que se dispersaran y abandonasen el lugar por seguridad.

Después de varias batidas por los alrededores, los policías localizan cerca del lugar donde se congregaban el centenar de personas a un varón que presentaba una herida sangrante en la cabeza. Al ser interrogado, el herido confirma que acaba de ser golpeado con un palo repetidas veces «por varias personas de etnia gitana» antes de poder huir para ponerse a salvo.

Sin embargo, el hombre herido rechaza en repetidas ocasiones la ayuda que le intentan prestar los agentes de la Policía Nacional y decide no interponer denuncia alguna contra sus agresores, alegando que «ya lo solucionará él mismo por su cuenta». Dada su negativa a tomar acciones legales, los agentes abandonan el barrio sin llevar a cabo la detención de ninguna personas. No hubo más avisos al respecto.