Principio de acuerdo entre Daorje y sus trabajadores en baterías de cok

El principio de acuerdo confirma las buena sensaciones que había dejado entre los representantes sindicales la reunión mantenida la víspera. Daorje expresó entonces «su intención de buscar la máxima recolocación de la plantilla con medidas no traumáticas», sin despidos, más allá de la fecha prevista para el definitivo cierre de baterías, el 31 de diciembre, tarea en la que participará la subcontrata. También se comprometió a participar en una comisión de seguimiento que quedará constituida el próximo martes.

Los sindicatos valoraron de forma positiva la actitud de la empresa a la vez que reclamaron concreción. Las respuestas llegaron ayer. «No se contemplan despidos. Daorje ha aceptado nuestras propuestas. Se ha comprometido a definir qué puestos se van a cubrir en otras tareas con el personal de baterías, cuántos trabajadores serán trasladados a las nuevas baterías de cok, en Veriña, y a quiénes impartirá los cursos de capacitación necesarios para adaptarse a nuevas tareas, teniendo siempre en cuenta sus perfiles y cualificación laboral y respetando las medidas de conciliación», manifestó ayer el presidente del comité, Vicente Núñez.

Dichas tareas así como el número de trabajadores de la subcontrata que participarán en el apagado de las baterías y que será trasladado a Gijón están pendientes de concretar a la espera de que Arcelor confirme los trabajos que encomendará a la subcontrata una vez lleve a cabo la anunciada reorganización de las empresas auxiliares. La multinacional «es la que marca los tiempos, y en función de sus decisiones iremos cerrando acuerdos en la comisión de seguimiento», señaló Núñez al respecto.

El principio de acuerdo tendrá que ser ratificado en la reunión señalada para el próximo martes. Será el punto de partida de una negociación «en la que nos mantendremos vigilantes para que transcurra en los términos establecidos».

Daorje es el principal subcontratista de baterías, doscientos trabajadores frente a los cincuenta que suman las demás, y también de Arcelor Asturias, con unos 1.800 entre las plantas de Avilés y Gijón. Le siguen Jofrasa, de limpieza industrial y de locales, y Asturmasa, de transporte, con unos trescientos cada una.

Fundada en 1974 por Daniel Alonso (el nombre es un acrónimo formado con las iniciales de sus tres primeros hijos), se integra actualmente en el Grupo Zima Corp, y además de en Arcelor también presta servicios en otras grandes multinacionales de la comarca, como Asturiana de Zinc o Saint-Gobain Cristalería. Además de tareas de operación y mantenimiento, su catálogo también incluye servicios de ingeniería y puesta en marcha de instalaciones, montajes mecánicos y fabricación de bienes de equipo.