El Principado fía la solución en Alu Ibérica a la que haya para Alcoa en Lugo

Precisamente sobre el papel de Alcoa en esta situación en la que encuentran las fábricas de Avilés y La Coruña, ayer el consejero fue muy claro. A la vista de los acontecimientos, cree Fernández que «se le ha caído la careta». Afirmó que «la intención última de Alcoa, viendo lo que está pasando en Lugo, no era sólo cesar su actividad en Avilés y La Coruña, sino que no se retomase la producción en estas plantas y mantener una posición hegemónica en este mercado». No obstante aclaró que esto será al final dirimido por un juez después de la denuncia al respecto planteada por los sindicatos.

En cuanto a la intervención de las administraciones para sacar al Grupo Riesgo de la compañía, Fernández recordó los acuerdos firmados y dijo que «el plan de Alcoa era eliminar la producción de aluminio primario en España, pero lo ha hecho con acuerdos que tienen una legitimidad y no se puede entrar a las bravas». De ahí que insistiera sobre la negociación que se lleva a cabo en Galicia como primer paso para la solución final también del resto de factorías alumineras. «El partido se juega en Lugo y de ese resultado depende Avilés», dijo utilizando un símil deportivo.

La intervención del consejero se produjo a petición de Podemos que ayer reclamó al Principado que «haga piña con el Gobierno de Galicia porque las tres plantas tienen que ir en una negociación conjunta», señaló la diputada Nuria Rodríguez, que pidió también más contundencia a la hora de reclamar a Madrid una solución para la industria asturiana. «En eso van a tener nuestro apoyo, si hay que ir a encadenarse al parlamento iremos», dijo.

También Izquierda Unida pidió más contundencia al Ejecutivo asturiano y apuntó que a la situación actual se llegó después de la política de venta de las industrias públicas en la década de los noventa, «es hora de que hagamos algo para no dejar en manos privadas sectores estratégicos», indicó Ángela Vallina, recordando como otros países europeos como Francia mantienen control sobre este tipo de industria «para evitar precisamente situaciones como las que estamos viviendo aquí».

El diputado de Foro, Adrián Pumares, también reclamó al Gobierno de Barbón que actúe con más contundencia ante el Ejecutivo de España.

Por su parte, Susana Fernández, de Ciudadanos, puso el acento en la dificultad para atraer un nuevo inversor por el coste de la energía. El consejo de Industria puntualizó que esa fue otra de las «mentiras» de Alcoa y el Grupo Partner. «Aseguraron que cuando se bajase de 40 euros/Kw reabrirían una serie y no lo han hecho, otra demostración más de que su voluntad era otra, pero eso lo tendrá que decidir un juez».

Enrique Fernández defendió que el cambio en la producción energética en España, «que nos situará en un horizonte de tres años como el país de Europa con la energía más barata», sí podría ser posible atraer un nuevo inversor, «serio y solvente», para la factoría avilesina y las plantas gallegas.

Por el PP, Álvaro Queipo pidió también que se actúe con Galicia poniendo como ejemplo de la defensa de su industria el trabajo de Núñez Feijoo, mientras «a Barbón nunca le hemos escuchado defender la fábrica de Avilés».

Por su parte, el diputado socialista, Luis Ramón Fernández Huerga, insistió en que la viabilidad pasa por la salida de la factoría del Grupo Riesgo, reconociendo la complejidad de lograrlo por los acuerdos firmados, «por lo que tenemos que continuar en la presión para conseguirlo y que llegue una solución con un proyecto serio de futuro».