«No pretendía atracar el supermercado, solo era un juego»

El juicio quedó visto para sentencia después de que su abogada solicitara su absolución en base a los informes que acreditan su discapacidad intelectual. El joven es conocido en la zona, en la que ya habría protagonizado altercados similares, y fue recientemente absuelto por el mismo juzgado por un presunto delito de amenazas a unas adolescentes en Llaranes.

La Fiscalía considera que los hechos son un delito intentado de robo con intimidación en local abierto al público en el que concurriría la eximente incompleta de enajenación mental. Por ello solicita un año de prisión con inhabilitación especial para el ejercicio del derecho de sufragio pasivo y sumisión a tratamiento ambulatorio para su enfermedad mental durante un periodo máximo de un año y once meses.

Según su escrito de acusación, el 19 de septiembre de 2019, sobre las ocho de la tarde, este joven, que entonces tenía veinte años, entró en el supermercado y con una pistola simulada en la mano, le dijo a las cajeras: «Esto es un atraco, que no entre nadie, ciérrame las puertas». Una empleada avisó a la Policía, que le detuvo poco después en el interior del establecimiento.

El revuelo fue tal que rápidamente se presentó la Policía Nacional así como un primo suyo, que advirtió a los agentes de los problemas mentales del joven, que lo han sentado varias veces en el banquillo de los acusados.