Un local avilesino cierra su interior por su oposición a la exigencia del pasaporte covid

Los trabajadores siguen sirviendo a sus clientes en la terraza que tienen habilitada dentro de la plaza de los Hermanos Orbón, el interior permanece vacío, los clientes entran para comprar tartas, pasteles o bombones, pero no a consumir, y esto se debe a una decisión tomada por «respeto a nuestros clientes y no como reivindicación», tal y como señala a este periódico el dueño de la confitería, Daniel García.

«No creemos que nosotros seamos nadie para pedir datos médicos a nuestra clientela, no se trata de que estemos en contra o a favor de las vacunas, simplemente creemos que es una medida discriminatoria», argumenta García, señalando que «igual que a la hora de servir no preguntamos a nuestros clientes si tienen algún tipo de enfermedad concreta, no tenemos derecho a preguntar por su elección de vacunarse o no», explicaba el dueño, asegurando que es consciente de que «prácticamente el 90% de nuestros asiduos están vacunados».

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Ante esta certeza, García quería «agradecer la comprensión de los clientes que están vacunados, que entienden la medida que hemos querido implantar y que consumen en terraza respetando nuestra decisión». El espacio externo que el local tiene, permite que el consumo únicamente en terraza «se note, pero no suponga estar hablando de pérdidas en el negocio». Aunque García confía en que la medida «dure lo menos posible».