La lluvia reduce a dos canciones el concierto de Lola Índigo

La gente tenía ganas de que la ex concursante de Operación Triunfo cantase en la noche grande de San Agustín y llenó las sillas dispuestas en la plaza del Niemeyer desde bien temprano. A las diez de la noche las alrededor de setecientas personas que acudieron al evento ya se encontraban sentadas y dispuestas a corear los temas de la madrileña, aunque tuvieron que comenzar a abrir sus paraguas porque comenzó a chispear. Las primeras gotas de lluvia comenzaron a hacer temer que ocurriera lo mismo que el día anterior, cuando se había suspendido el concierto de Loquillo, y poco antes de la hora del inicio la organización advirtió incluso de sus dudas sobre la viabilidad de la actuación.

Finalmente se optó por retrasar el escenario de modo que se pudiera evitar la lluvia, y una veintena de técnicos se afanaron en secar el suelo y los equipos de sonido e iluminación para intentar sacar adelante el espectáculo durante tres cuartos de hora. Un tiempo que el joven público, llegado en algunos casos de otras provincias, aguantó estoicamente en sus asientos, ataviados con sus cazadoras e impermeables, que muchos habían llevado en previsión de que la lluvia irrumpiese.

Y al final tampoco pudo ser. Se canceló el segundo de los grandes conciertos de las fiestas, aunque sus seguidores apreciaron el detalle de que la artista saliese al escenario e intentase sacar adelante una actuación que no le dejaron llevar a cabo bajo el intenso aguacero que comenzó a case pasadas las once de la noche. Veinte minutos más tarde comenzó a desalojarse la plaza del Niemeyer tras anunciarse que el concierto se daba oficialmente por cancelado y que hoy mismo comenzaría a tramitarse la devolución de las entradas.

Solo queda esperar que Cepeda y Bras Rodrigo, conciertos previstos para hoy, tengan más suerte y puedan interpretar sus temas ante el público que les espera.