B. PINO
AVILÉS.
Sábado, 12 de diciembre 2020, 01:47
A José Iván García, de 63 años y oriundo de Blimea, en San Martín del Rey Aurelio en plena cuenca minera, fue el deber el que le alejó de Asturias, pero el amor el que le retuvo en Canarias. Al alcanzar los dieciocho ... años fue llamado a filas para cumplir el servicio militar obligatorio, y destinado al archipiélago, donde, poco antes de colgar el uniforme, conoció a la que se convertiría en su mujer, Lucía Bolaños. El matrimonio se ofició en la ermita de la virgen de La Cuevita, en Artenara, localidad en la que residían y donde nacieron sus tres hijas.
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Viudo desde hacía varios años, como consecuencia de una larga enfermedad padecida por Lucía, José Iván seguía desempeñándose como mecánico automovilístico en la isla, aunque sin perder las oportunidades que la vida le brindaba de regresar a Asturias, su tierra natal.
Y es que en Blimea aún se yergue la casa de sus padres, que conservaba en propiedad en la que toda la familia se reunía periódicamente. También en Avilés era usual verle, visitando a su hija Raquel.
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