El comisario Asier Mensuro inauguró esta mañana la exposición con una visita guiada para la prensa María Fuentes

La fantasía surrealista de Roland Topor deja huella en el CMAE

El Centro Municipal de Arte y Exposiciones acoge desde mañana una exposición con 51 grabados que el artista francés realizó desde los años 60 hasta su muerte en 1997

A. l. jambrina

Avilés

Jueves, 23 de enero 2020, 13:00

El aclamado director de cine y guionista italiano, Federico Fellini, afirmó en una ocasión que Roland Topor, artista francés conocido por su humor negro y su carácter surrealista, «fue el último representante de aquellos grandes ilustradores capaces de crear un universo completo descrito hasta ... el más mínimo detalle». Desde mañana se podrá disfrutar de parte de su obra, un total de 51 litografías y grabados, en una exposición que acoge el Centro Municipal de Arte y Exposiciones de Avilés (CMAE).

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Desde mañana hasta el 1 de marzo se podrá visitar la muestra, bajo el título 'El arte fantástico de Roland Topor', que está comisariada por el coleccionista e historiador del arte, Asier Mensuro. Esta mañana ha tenido lugar una primera visita guiada para la prensa en la que el propio comisario ha hecho un repaso a la obra del artista francés y ha explicado la importancia de su trabajo y su filosofía en la escena artística internacional de la segunda mitad del siglo XX.

«En esta muestra podremos ver la obra gráfica de Topor, fundador del grupo 'Panico' junto a Fernando Arrabal y Alejandro Jodorowsky, que probablemente es uno de los ilustradores y dibujantes más copiados e imitados y que además fue un gran autor en otros campos como pueden ser el cine, la literatura o la animación», datacó esta mañana Mensuro.

En la muestra que ahora llega a Avilés se pueden contemplar varias series en las que queda patente el humor negro, la sátira y la valentía del artista, que llega a jugar con las deformaciones de la anatomía humana, el sexo en su expresión más voraz o la muerte como un instinto básico del ser humano.

Como bien explica el comisario de la muestra, «Topor es hijo de inmigrantes polacos judíos, pero no se corta en realizar una obra en la que hace una sátira de la esvástica nazi, ni tiene reparos en reirse de algo tan escabroso como la mutilación y el canibalismo. Esa libertad hizo que siempre se le haya permitido decir y hacer lo que le daba la gana».

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