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BORJA PINO
AVILÉS.
Domingo, 20 de junio 2021, 01:34
Diez días después de que los caldos de las celebridades llegasen a los establecimientos hosteleros de la ciudad, la duodécima edición del Famous Wine ... Festival concluye hoy dejando en el paladar de los participantes el buen sabor no sólo del vino, sino también del éxito. Y es que, durante estas jornadas, la práctica totalidad de los negocios ha registrado una buena afluencia de público y una elevada demanda de los productos del certamen. Un resultado que ha sido un verdadero alivio para los locales y que vaticina una buena temporada de verano en la comarca.
«Pese a la pandemia, nos ha ido muy bien, en la línea de otros años», apuntaba, satisfecho, Santiago Medina, propietario del Merlot Vinos y Tapas. En su caso, los caldos procedentes de la bodega del cineasta Francis Ford Coppola, ya veteranos de la cita, han sido claves de ese triunfo, combinados con «nuestra tortilla Merlot, que ha sido muy demandada por ser un maridaje excelente».
También el cine ha sido protagonista en el Prestoso, que aún hoy ofrece vinos bajo el sello de José Luis Cuerda. Tal como recalca su dueño, Benjamín Díaz, «el resultado ha sido maravilloso, algo para repetir», a lo que contribuyeron, en buena medida, las tres tapas diseñadas para el certamen, inspiradas en las preferencias culinarias de Cuerda.
Un hecho que, al margen de la anécdota, da la medida de un periodo en el que ha servido de balón de oxígeno para el sector tras los duros meses pasados. «Hemos quedado contentos, ha sido un alivio que la gente haya respondido así. Y todo lo que ayude a que la gente venga a visitarnos es estupendo en estos tiempos».
De hecho, la experiencia de estos doce años ha demostrado que, en cada edición, son las nuevas incorporaciones las que acaparan mayores atenciones. Y, en ese sentido, el restaurante El Círculo, que comercializó los tres tintos Ribera aportados por el Museo Thyssen, puede dar fe de ello.
«Lo que nos trajeron, duró el primer día. Tuvimos que pedir más para el segundo fin de semana», recuerda un satisfecho Javier Rico, propietario y cocinero. La afluencia ha sido muy semejante a la del año pasado. Quizá, en el caso concreto de Rico, «ha habido un descenso muy pequeño, porque en 2020 pudimos usar la barra. Pero apenas se ha notado, ha sido mínimo».
Igualmente contenta cerrará hoy su participación Ángeles Azabal, dueña de La Madreña. La presencia en su local del vino del cantante Sting, otra de las novedades del certamen, ha cosechado muy buena acogida, «como siempre pasa con lo nuevo». Por ello, anima a sus compañeros de gremio «a que se muevan para que nunca perdamos este festival en Avilés. Al final, está siendo positivo para todos».
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