Digitalizarse ya no es una opción

No hace falta más que analizar los datos de crecimiento del comercio electrónico en los últimos años para darse cuenta de que la digitalización es un proceso casi imprescindible para asegurar la supervivencia del comercio minorista. Es una tendencia que viene de lejos, pero no cabe duda de que la pandemia aceleró esta deriva hacia los nuevos métodos y herramientas de venta.

Este proceso puede suponer una crisis para muchos, pero también ofrece grandes oportunidades para otros, y ahí es donde juega un papel de vital importancia el programa de Digitalización del Comercio de Asturias (DICA), promovido por la Consejería de Promoción Económica del Principado con una inversión de cinco millones de euros que pretende fomentar la modernización del comercio de proximidad a través de su adaptación tecnológica.

El programa está presente en toda la región y trata de analizar en qué nivel de digitalización se encuentran los negocios minoristas para realizar un diagnóstico inicial y potenciar sus debilidades. En la comarca de Avilés ya han sido evaluados 191 comercios de proximidad, con una tasa de aceptación del 86,4%, superior a la media de Asturias.

En esta primera fase de análisis es cierto que el comercio local no ha salido muy bien parado, pues el 64,4% de los negocios evaluados estaban en el nivel de digitalización más básico. Un 30,4% en el intermedio y solo un 5,2% en un nivel avanzado de adaptación al nuevo mercado.

Eso solo significa que queda mucho trabajo por hacer y en eso están los pequeños empresarios locales. Es el caso, por ejemplo, de Sheyla González, dueña de Bicos, una tienda de productos infantiles ubicada en Las Vegas. Según explica esta emprendedora, «el programa DICA es interesante porque hay unos técnicos que visitan tu negocio, revisan cómo tienes tu página web o el uso que haces de las redes sociales y a partir de ahí te indican cómo mejorar».

En su caso en particular, fueron «pequeños detalles» que ya logran resultados. «Por ejemplo, se enfocaron en recomendarme el uso de whatsapp bussiness para comunicarme con mis clientes, implementar mejoras de velocidad en la web para que la gente no huya porque vaya lenta o estrategias de venta y fidelización en redes sociales», explica González.

En todos los casos son los técnicos de CTIC los que acuden a visitar los negocios que deseen participar para hacer un diagnóstico inicial de su situación y comenzar un programa de acompañamiento de seis meses con especialistas en comercio digital y técnicas de venta online que permitirán una transformación total del tejido comercial de la comarca.

Hay otros casos en los que el futuro pasa por utilizar las nuevas redes sociales como herramientas de venta alternativas a la tienda física de toda la vida. Es el caso de Chic@10, un negocio de ropa low cost en Piedras Blancas regentado por Nuria Gargallo. «Al final acabas haciendo cosas que nunca te habrías imaginado, como ponerte tú misma delante de una cámara y subir a TikTok vídeos enseñando la ropa que tienes a la venta. Son cosas nuevas, pero hay que subirse al carro porque los resultados están ahí, ahora mismo el 80% de lo que vendo lo hago través de Facebook y es una oportunidad que no podemos dejar pasar», reconoce Gargallo, que también forma parte del programa.

En Avilés, la histórica tienda Regalos Venus también se ha propuesto modernizar sus técnicas de venta tras 43 años de trayectoria. «No es nada sencillo, pertenezco a una generación que tiene muchas dudas y miedos con la tecnología, pero el programa DICA te apoya y te guía y ya estoy en proceso de mejorar las redes sociales de la tienda y de crear una nueva página web. Se adaptan a tus necesidades reales», agradece Yolanda Vázquez.