«Con el confinamiento creció la prostitución online y a domicilio»
Esther Rodríguez | Coordinadora de APRAMP ·
«Se ha incrementado la invisibilidad de estas mujeres y han estado más expuestas a situaciones de violencia»Secciones
Servicios
Destacamos
Esther Rodríguez | Coordinadora de APRAMP ·
«Se ha incrementado la invisibilidad de estas mujeres y han estado más expuestas a situaciones de violencia»BORJA PINO
AVILÉS.
Jueves, 11 de marzo 2021, 00:38
Un año después de paralizar España, la pandemia del coronavirus ha sumado a sus múltiples efectos negativos el empeoramiento de las condiciones de aquellos colectivos ya de por sí en un estado precario. Es el caso del de las prostitutas, a las que en Avilés, ... desde 1998, atiende la Asociación Para la Reinserción de la Mujer Prostituida (APRAMP). Su coordinadora, la psicóloga castrillonense Esther Rodríguez Noval, analiza el impacto de la crisis sobre un sector marcado por la vulnerabilidad.
-Se cumple el primer aniversario de la pandemia ¿Ha sido un año difícil para APRAMP?
-Bueno... En general, no ha sido un año fácil para nadie, y, evidentemente, para nuestro colectivo tampoco lo ha sido. Nuestra asociación tiene dos programas marcos: la Unidad Móvil y el Centro de Acogida; y el primero se ha visto suspendido durante el confinamiento, aunque, al ser declaradas como servicio esencial, hemos podido prestar atención a las mujeres telefónicamente, y también presencialmente en casos de urgencia en el Centro de Acogida. Sin embargo, podemos decir que hemos dado respuesta a las necesidades planteadas por las mujeres, gracias al trabajo coordinado y en red.
-¿Qué escenario encontraron?
-La pandemia ha incrementado la invisibilidad de las mujeres prostituidas, y ha fomentado el aumento de la clandestinidad del negocio de la trata. Estas mujeres han estado aún más expuestas a situaciones de violencia. Y aparte de ese hecho, han expuesto gravemente su salud.
-¿Y en qué condiciones?
-Que hayamos podido constatar, han aumentado las demandas digitales, a través de 'webcam', con el confinamiento. No obstante, algunos clientes han solicitado a las mujeres que fuesen a sus propias viviendas, con los riesgos evidentes que ello suponía. No solo por el peligro de contagio, sino también por el hecho de saltarse el cierre perimetral; al no poder justificar el motivo del viaje, son ellas las que han tenido que asumir el coste de las multas.
-¿Significa eso que se dispararon los contagios?
-Hubo algunos contagios puntuales.
-Con la pérdida de empleos, ¿han crecido las mujeres que han optado por esta práctica?
-Lo que vemos cómo mujeres con los itinerarios avanzados, insertadas laboralmente, han perdido sus empleos y se han visto abocadas a volver a contextos de prostitución. Y eso se ha debido a que las medidas implantadas por la Administración, como el Ingreso Mínimo Vital, han dejado fuera a la mayoría del colectivo, por encontrarse en situación administrativa irregular.
-¿Ha variado la pandemia su postura hacia la prostitución?
-No. Desde APRAMP seguimos reivindicando medidas reales contra la trata y la explotación sexual a través de una ley integral. La prostitución y la trata son las dos caras de una misma moneda. Por eso, nunca consideraríamos la violencia sexual y la mercantilización de los cuerpos de las mujeres como un trabajo. En ese sentido, nuestra organización es abiertamente abolicionista.
-¿Existe una conciencia social de su alcance real?
-Pues no lo tengo tan claro. Si hay algo que hemos comprobado en este año es que la demanda se mantiene; no aumenta, es cierto, pero tampoco decrece. Ahora bien, es cierto que desde APRAMP continuamos llevando a cabo talleres de sensibilización en centros educativos, para que conozcan esa realidad.
-¿Y qué es lo que descubren?
-Por encima de todo, las mujeres que se encuentran atrapadas en ese tipo de redes, ya sean organizadas o de pequeña escala, lo están por el deseo de mejorar sus condiciones de vida. La mayoría proceden de otros países, e iniciaron procesos migratorios bajo falsas promesas, que las abocan a deudas desorbitas con aquellos que las trajeron. Es esa dinámica la que las perpetúa bajo la sombra de la explotación.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.