El conductor huido en Avilés provocó un atropello mortal en marzo

El 6 de marzo de este año, un vehículo que conducía el joven y en el que viajaba con otras personas se saltaba el paso de peatones de El Muelle a la altura del apeadero de Feve y atropellaba a un hombre de 59 años. La víctima, que tuvo que ser trasladada al Hospital Universitario Central de Asturias con varios traumatismos en la pierna derecha, traumatismo grave en la cabeza y varias lesiones internas, y falleció al no poder superar las heridas.

El conductor se dio a la fuga y fue localizado una hora después por la Policía Local tras seguir las pistas aportadas por testigos del accidente. Una de ellas era que el vehículo estaba rotulado con el nombre de un taller de vehículos, que visitaron los agentes y obtuvieron la localización del autor del atropello que había tomado prestado el coche.

Por ese atropello mortal se enfrenta a un delito contra la seguridad vial y otro de homicidio por imprudencia grave. Además, el joven dio positivo en la prueba de alcoholemia (0,81 y 0,80) y también en el test indiciario salival de detección de drogas (cocaína), según indicó entonces la Policía Local de Avilés. Por último, se le imputó un delito de abandono del lugar del accidente tras atropellar al peatón.

Se da la circunstancia de que desde entonces el joven está a la espera de juicio, por lo que no ha tenido que hacer frente a ninguno de esos cargos, y ni siquiera se le ha retirado el carné de conducir. Tampoco parece que se haya producido arrepentimiento alguno, porque el accidente que provocó el sábado se desarrolló en circunstancias similares y pudo tener graves consecuencias al invadir la acera y derribar una farola en La Plata.

Tras el accidente, que se registró poco antes de las seis de la tarde, el conductor emprendió huida a pie a través de las fincas que suben a San Cristóbal. Se inició entonces una intensa búsqueda por parte de la Policía Local hasta que logró detenerlo oculto en unos matorrales. El detenido fue sometido a la prueba de alcoholemia y arrojó un resultado de 0,97 y de 1,02 miligramos de alcohol por litro de aire espirado.

A pesar de la gravedad de ambos accidentes, el joven seguirá a la espera de hacer frente a la justicia para asumir las consecuencias de sus imprudencias.