Secciones
Servicios
Destacamos
Miércoles, 11 de noviembre 2020, 00:37
No tenía permiso para celebrarse, pero tampoco fue disuelta, aunque sí muy vigilada por un importante número de agentes policiales. Unas trescientas personas, regresaron ayer a la plaza de España a protestar por el cierre de sus locales sin ayudas. Agotados por los gastos que ... llegan sin pagar, no encuentran otro modo de expresar su hartazgo y cansancio. Como el día anterior, hosteleros y trabajadores no estaban solos, también se sumaron distribuidores y clientes. Tambores, bandejas, vuvuzelas y hasta panderetas sirvieron para armar ruido durante hora y media, desde las once hasta las doce y media, hora en la que los tres representantes de la plataforma SOS Hostelería Avilés bajaron del edificio consistorial de entregar sus peticiones al gobierno. Para entonces, la concentración ya había rebajado su número.
La vigilancia policial fue tan amplia como discreta, por parto de Policía Local y Nacional, que apostaron varios vehículos al comienzo de la calle de San Francisco mientras los agentes, uniformados y 'de paisano', se distribuyeron por la plaza. Todo transcurrió con tranquilidad. Ayer ni siquiera hubo lectura de manifiestos, en realidad la convocatoria surgió tras el enfado de este grupo de hosteleros por no haber sido recibidos el día anterior, aunque en realidad se debió a un malentendido que ayer se trató de explicar, aunque las suspicacias continúan.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Fallece un hombre tras caer al río con su tractor en un pueblo de Segovia
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.