«Que no caiga en el olvido», clama la familia de Capellán tres años después de su muerte

Nadie del entorno familiar ha logrado pasar página tras la muerte violenta de Capellán. El paso del tiempo sin la detención de su agresor ha multiplicado el dolor por la pérdida de una persona muy querida en Avilés. Algunos han preferido apartarse y tratar de continuar con su vida, pero ayer, en el tercer aniversario de su muerte, volvió a surgir una petición unánime para que se intente localizar al asesino.

Eduard González mató a Daniel Capellán con un cuchillo que cogió de la barra del bar de El Cruce de Llaranes el 25 de noviembre de 2017 y huyó del lugar, en un principio a pie, y sin documentación. En esa escapada contó con la ayuda de al menos otras cuatro personas, con residencia en Avilés y en Oviedo, que fueron detenidas meses después por la Policía Nacional acusados de haber sido cómplices.

La Policía Nacional cree que Eduard González se ha mantenido desde que abandonó España huido de la justicia protegido por un entorno de delincuencia en Bélgica, y amparado en cierta forma por una cierta laxitud de la justicia y las fuerzas de seguridad del país.

Bélgica, Rumanía, Alemania, España, República Dominicana Estados Unidos... Son solo algunos países en los que algunas fuentes aseguran haber visto al prófugo, pero las únicas pistas con cierta solvencia lo han ubicado en Bélgica. De hecho, agentes de la Policía Científica de la Comisaría de Avilés llegaron a desplazarse hasta ese país para seguir investigando tras el suceso, pero sin resultados positivos. En los últimos años han surgido también muchas teorías sobre su posible presencia en otros países de Latinoamérica, aunque la familia de Daniel Capellán calificó ayer esas pistas falsas como «bulos que lanza la gente».

El presunto asesino parece que nunca se ha mantenido ajeno al movimiento de la familia y amistades de la víctima para tratar de que sea localizado y detenido. Conoce las campañas de difusión de su imagen, de sus contactos y hasta de los sitios que frecuentaba en territorio belga que han lanzado, y ha intentando, incluso, desactivarlas con coacciones. Según publicó este periódico en agosto de 2018, la familia de Capellán llegó a denunciar amenazas en un mensaje recibido a través de las redes y apuntaba al propio González como autor del mismo.

El movimiento de apoyo a la familia de Capellán para localizar al autor de su muerte llegó hasta su país de origen, República Dominicana, desde donde surgieron denuncias sobre la supuesta identidad falsa de Eduard González para enviar mensajes amenazantes intentando desactivar la campaña para intentar localizarlo.