Avilés y Puerto impulsan la regeneración de la margen derecha de la ría en San Juan

Sin embargo, esta situación ha provocado que se piense en otras medidas como el traslado en lancha desde la margen izquierda de la ría, donde los problemas de estacionamiento desaparecen.

La buena acogida de los paseos en barca por la ría de Avilés potencia esa idea que reforzaría el potencial turístico. En este sentido, la Autoridad Portuaria ha iniciado los trámites para licitar la construcción de un nuevo embarcadero en las inmediaciones de la antigua sede del Espacio Portus.

Como se sabe, una de las salas de este centro cultural acogerá el futuro Centro de Interpretación del Cañón de Avilés. Es un veterano proyecto del Ayuntamiento que, por fin, podría culminarse ya que la intención del gobierno municipal es contratar en el último trimestre del año la elaboración de los contenidos.

De esta manera, se confía en que existan suficientes elementos atractivos para justificar un desplazamiento entre ambas orillas. Tampoco se puede obviar el interés del paseo desde San Juan hacia el faro, un recorrido plano y accesible a todo el mundo.

El Ayuntamiento de Avilés también realizó una manifestación de interés de cara a los fondos europeos con el objetivo de conseguir recursos para recuperar las playas de San Balandrán y de El Arañón, además de construir una senda ciclista en la margen derecha y que uniría San Juan con Zeluán y éste con la ciudad. Son propuestas que se van lanzando a la espera que la administración central también colabore.

En este sentido, se espera que la Demarcación de Costas termine por definir sus actuaciones de recuperación de las marismas en la zona y que también pueden contribuir a incrementar el interés para posibles visitantes. La actuación de Costas ya se ha anunciado en repetidas ocasiones, pero aún no termina de definirse.

Nuevamente, es un tema de gran complejidad afectado tanto por la presencia de la depuradora y todos los cambios que se deberán hacer como por la existencia de una zona industrial que no se quiere perjudicar.

Y es que, además del polígono de Maqua, en San Juan se mantiene activo el astillero Ría de Avilés, cuyas dos gradas forman parte del paisaje urbano y que es una actividad que no se quiere entorpecer. De ahí la prudencia con la que se avanza en todas las actuaciones.

En todo caso, son propuestas que entran en el modelo turístico de la ciudad, donde se busca mantener la idiosincracia local para atraer a los visitantes y fidelizarlos mediante una serie de experiencias que sólo puedan vivir en Avilés.

Tampoco se quiere alterar la vida en la margen derecha de la ría. Por sus características es un espacio que no puede asumir un aluvión de visitantes, pero donde un goteo constante de viajeros puede ayudar a revitalizar la zona.

Las actuaciones no se limitan a San Juan. La Autoridad Portuaria de Avilés ya ha iniciado la licitación para construir un nuevo embarcadero en San Balandrán, después de que se derrumbase la pasarela que daba servicio a los vecinos de Zeluán y que también era un lugar al que iban muchas personas a pescar.

También en esta línea, la Autoridad Portuaria ha iniciado la licitación para mejorar el Aula de la Naturaleza de Mavea en las inmediaciones de San Balandrán y que permiten explicar a los visitantes la diversidad biológica de la ría avilesina y su evolución en los últimos años: desde la riqueza previa a la gran industrialización de los años cincuenta; las consecuencias de la contaminación y como, con el saneamiento, ha comenzado a recuperase la vida.