El primer bonito del norte bate un nuevo récord, 330,60 euros el kilo en la lonja de Avilés

La cadena de supermercados asturiana donará la primera tina a las cocinas económicas de Oviedo y de Gijón y a la Asociación Mierense de la Cocina Solidaria (Amicos) y pondrá el resto a la venta en sus establecimientos. El precio «podría rondar los treinta euros, aunque todavía es pronto para saberlo», manifestó Armando Prendes, responsable de pescaderías de Alimerka, que subrayó el «compromiso» de la cadena con «el pescado de nuestras costas, que es de mucha calidad».

Los 6.971 kilos de bonito fueron pescados en aguas atlánticas próximas al archipiélago de las Azores por el 'Esmeralda Tercero» y el 'Berritz Amatxo', patroneados por Fidel Álvarez y su hermano Iván, ambos con base en Avilés, y por el 'Goienkale', de Bermeo. Si los dos primeros son habituales en la carrera por el primer bonito del año, el buque vasco participaba por primera vez. «Ha sido muy bonito, y el precio ha sido muy bueno», manifestó su patrón, Enrique Zabaleta. Los tres presentaron sus capturas en común. «Sacaremos unos 40.000 euros brutos cada uno», manifestó Fidel Álvarez.

Los tres barcos zarparon de Avilés el martes 14 del presente mes y faenaron «a unas 180 millas de San Miguel», la mayor isla del archipiélago. «Pescamos más o menos la misma cantidad que el año pasado, con la diferencia de que entonces tardamos ocho o nueve días y ahora tres o cuatro», añadió el patrón y armador del 'Esmeralda Tercero, que se mostró satisfecho. «Si no se pagan estos precios no merece la pena embarcarse en esta aventura».

La subasta se celebró a las siete de la mañana y tras la primera tina el precio cayó bruscamente. El segundo lote se pagó a 19,80, el bonito pequeño (mono) a 7,23 y la bonita (patudo) a 5,10. Al final el precio medio se situó en 17,30 euros el kilo, 17,90 si se excluye la bonita. Al margen de Alimerka, Mercadona se llevó 2.600 kilos y el resto fue adquirido por diferentes comercializadores.

Fue, junto a la de 2016, la subasta más tempranera de la historia, y la segunda no se hará esperar demasiado. Varios barcos asturianos, gallegos, cántabros y vascos ya han partido o ultiman los preparativos para zarpar rumbo hacia las Azores, a unos 1.400 kilómetros al Oeste de Lisboa, donde a estas alturas del año aún se encuentra el bonito en su migración anual hacia el Golfo de Vizcaya.