San Agustín regresa al parque Ferrera

El trabajo de restauración comenzó el pasado mes de marzo, después de que se detectase que el soporte de madera se encontraba en muy mal estado y presentaba un importante nivel de deterioro. La tarea ha estado en manos de uno de los profesores de la Escuela de Cerámica, Jesús Castañón, que en los últimos meses se ha encargado de ir despegando pacientemente cada uno de los azulejos del soporte, retirarles la silicona de la parte trasera y realizar una limpieza especializada.

Ahora se han colocado en un nuevo soporte, que en esta ocasión es de un material diferente, en concreto de metal galvanizado, por lo que se espera que sea capaz de resistir mejor las inclemencias del tiempo, ya que se encuentra a la intemperie y en una zona muy húmeda.

El mural fue creado en el año 2002, cuando el entonces director de la Escuela de Cerámica, Ramón Rodríguez, invitó a artistas como Charo Cimas, Carlos Coronas, Cristina y Esther Cuesta, Favila, Ricardo Fernández, Vicente Pastor, Demetrio Reigada, Truyés y el propio Castañón, que plasmaron en cerámica su visión de la relación entre ambas ciudades. Las obras se expusieron en la Casa de Cultura durante el certamen de cerámica del San Agustín antes de llegar al parque de Ferrera.

Un año antes, otro mural de similares características se había creado en San Agustín, en una muestra del lazo que une a ambas localidades y que lleva el nombre de Pedro Menéndez de Avilés, de cuyo nacimiento se cumplirán en 2019 quinientos años. Con el mural a punto e instalado, Avilés se prepara para celebrar la efeméride.