Imagen de archivo del entorno de la iglesia de Cancienes. MARIETA

Acepta su expulsión de España para no ir a la cárcel por un intento de homicidio en Corvera

El acusado evita así una pena de cinco años de prisión tras agredir con un objeto punzante a un joven en Cancienes en el año 2020

Borja Pino

AVILÉS

Miércoles, 14 de septiembre 2022

Sin cárcel, cierto, pero también sin posibilidad de permanecer en suelo español durante los próximos cinco años. Ese es el acuerdo del que se beneficiará el acusado de perpetrar un intento de homicidio durante una discusión ocurrida en Cancienes hace dos años, y al que las dos partes en litigio llegaron ayer, durante la vista celebrada en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial, en Oviedo. De ese modo el sujeto, de nacionalidad dominicana, logrará esquivar la pena de media década de prisión solicitada por el ministerio fiscal, y que él mismo aceptó cumplir en un primer momento.

Publicidad

Así parece cerrarse el último capítulo de un suceso que se desató en la noche del 3 de septiembre de 2020. En torno a las nueve y media, en los alrededores de la iglesia de la localidad, el acusado, que por entonces contaba 19 años e iba acompañado de otro miembro de su familia, se enzarzó en una discusión con la víctima, de edad similar. En un momento dado el agresor sacó del bolsillo de su pantalón un objeto puntiagudo y cortante, y se lo clavó a la víctima en el hemitórax derecho. Herido de gravedad, el joven fue traslado al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), donde se le estabilizó.

Por su parte, el atacante emprendió la fuga, aunque no tardó en ser aprehendido por agentes de la Guardia Civil, y puesto a disposición judicial. Desde el primer momento reconoció la autoría de los hechos, y su acción fue considerada constitutiva de un delito de homicidio en grado de tentativa, aunque se consideró como atenuante el ingreso de 500 euros, en concepto de inicio de pago de la responsabilidad civil.

También deberá indemnizar a la víctima con 1.800 euros, y no acercarse ni contactar durante seis años

Ahora, tras sortear la cárcel, y al margen de su deportación, no podrá comunicarse con la víctima, ni acercarse a menos de quinientos metros de ella o de su domicilio, por espacio de seis años. Además, el por entonces herido recibirá una indemnización de 800 euros por las lesiones, más otros 1.000 por las secuelas, consistentes en una cicatriz de forma triangular de un centímetro por cada lado en el costado derecho. Finalmente, el acusado deberá abonar los intereses legales correspondientes.

En el momento en que se produjo, el suceso conmocionó a los habitantes de la parroquia corverana. Sobre todo, a tenor de la implicación del herido, un joven del que varias voces dijeron que era «un buen chaval, que nunca se mete en lío». Aunque las razones del enfrentamiento entre ambos están envueltas en la duda aún hoy, algunas voces afirmaron entonces que el agredido recriminó al agresor y a su acompañante por cierto delito que estaban cometiendo.

Publicidad

Si las opiniones sobre el agredido eran mayoritariamente positivas, no puede decirse lo mismo de las vertidas sobre el acusado. En Cancienes tanto él como su familia se hicieron conocidos por su «poco civismo», reflejado en la consumación de hurtos a personas mayores y de otras peleas de menor gravedad. Poco antes del hecho fueron expulsados de su vivienda por impago.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

3 meses por solo 1€/mes

Publicidad