Fallece el destacado violinista avilesino Luis Magín Muñiz

Hijo de melómano y padre de músico, el violinista avilesino Luis Magín Muñiz Martínez falleció ayer a la edad de 77 años. El responso se celebrará a las once de esta mañana en Santo Tomás de Cantorbery, y el funeral a la cinco de la tarde del martes en la referida iglesia parroquial.

Luis Magín tocó su violín bajo las mejores batutas y en las mejores salas del país. Fue profesor de solfeo de la Orquesta Sinfónica de Asturias, en la que debutó, como violinista, a la temprana edad de 13 años de la mano de su fundador y su maestro, Muñiz Toca. Su padre, 'Majo', le había transmitido el amor por la música, arte en el que se inició de la mano de 'El Cosaco'. Los sonidos que arrancaba de su violín han sido aclamados por violinistas de la talla de Henryk Szeryng y saboreados por los Reyes.

Magín también fue un gran docente, tarea en la que se volcó a raíz de la disolución de la Orquesta Sinfónica de Asturias. Años después, tras su renacimiento, se reincorporó a la misma bajo la dirección de Benito Laurent, aunque un accidente puso temprano fin a su periplo como intérprete profesional. Como docente enseñó no solo violín, también solfeo y guitarra, siguiendo un método de bajo cifrado por él mismo desarrollado. Entre sus alumnos se encuentran profesionales como Di Giraldo, Gilsanz o, ya en el ámbito del violín, Javier Muñiz o Marcelino García. Quienes le conocen aseguran que su calidad humana superaba la musical.

Su hijo, Luis Magín Muñiz es uno de los mejores violistas de España. Secretario ejecutivo de la Sociedad Internacional de la Viola, también ejerce la docencia.