Fallece en Oviedo el periodista avilesino Demetrio Reigada

Exredactor de LA VOZ DE AVILÉS, excorresponsal en la ciudad de EL COMERCIO y reconocido pintor, el periodista avilesino Demetrio Reigada falleció ayer en Oviedo a los 64 años de edad víctima de una enfermedad que le sobrevino hace aproximadamente un mes. La capilla ardiente se encuentra instalada en la sala número ocho del Tanatorio Avilés y el funeral se celebrará a las doce del mediodía de mañana viernes en la iglesia parroquial de Santo Tomás de Cantorbery.

Los redactores más veteranos de LA VOZ recuerdan la destreza de Reigada con el lápiz. Aprovechaba cualquier tiempo muerto para plasmar sobre un trozo de papel una imagen realista, casi una fotografía. La pintura era su verdadera pasión, oficio que durante muchos años compaginó con el periodismo. Demetrio, como le llamaban sus compañeros, llegó a esta casa a mediados de la década de los años setenta. Sustituía a José Estévez Alonso 'Estalo', otro histórico de LA VOZ, como coordinador de corresponsales. Eran sus primeros pasos en el periodismo.

Mediada la siguiente década se integró en EL COMERCIO como corresponsal en Avilés. Era el relevo de Venancio Ovies, otra firma con mayúsculas en la historia del periodismo local. Reigada no era amigo de permanecer demasiado tiempo en un mismo puesto. También dejó EL COMERCIO. Un tiempo después retomó la profesión como responsable de prensa del Partido Popular bajo el mandato como alcalde de Agustín González, cargo que mantuvo de forma informal en el grupo municipal tras el regreso de Santiago Rodríguez Vega a la Alcaldía.

Fue su último trabajo como periodista. Después se jubiló, estatus que le permitió centrarse en lo que más le gustaba, la pintura. Participó en innumerables exposiciones individuales y colectivas, y el destino quiso que presentase su último trabajo en la casa que le vio nacer como periodista, LA VOZ. A finales del pasado mes de julio se presentó en esta Redacción con el que probablemente ha sido su último cuadro. Era su aportación a la exposición colectiva que organizó el Aula de Cultura con motivo de Bitácora, la Semana de la Mar de Avilés. Se situó en un lugar preferente, el primero según se accedía al recinto expositivo, y uno de sus elementos centrales era un barco de papel, de papel de periódico.