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Tenían que aterrizar en Asturias, pero los fuertes vientos racheados del sur que están atravesando la pista por la cabecera 29, la que da a la vaguada de Santa María del Mar, ha obligado a desviar a Santander y a Barcelona dos vuelos que tenían como destino el aeropuerto asturiano. El primer afectado fue un vuelo de Iberia procedente de Madrid. Pese a que intentó el aterrizaje, las rachas de viento impidieron la operación, por lo que la compañía decidió llevar el pasaje a Santander.
Después le tocó el turno a un vuelo de Vueling, procedente de Barcelona. Las condiciones meteorológicas eran tan complicadas que ni si quiera optó por aterrizar, para retornar de nuevo al aeropuerto de El Prat.
Pese a que el viento aún sigue soplando con fuerza, el vuelo de Volotea procedente de Milán sí logró su propósito y tomo tierra en la pista asturiana.
Las condiciones meteorológicas también generaron problemas en el aeropuerto de Asturias esta semana. El pasado martes, un avión de la compañía Air Nostrum, procedente de Madrid, fue alcanzado por un rayo, lo que obligó a dejar a la aeronave en la plataforma hasta que fue reparada. Un rayo fue, también, la causa de que, el mismo día, un avión de Volotea, procedente de Granada, tuviera que quedar en Asturias a la espera de reparación.
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