La variante de Pajares ya tiene sus vías

Esta era la instalación de vías más compleja, ya que en el resto de los túneles con tipología de vía en placa (Peredilla, Buen Suceso I, Pontones, Sotiello, Vega de Ciego y Pico de Siero) también se completó el montaje y el hormigonado en ambas vías, con la instalación de otros 12,7 kilómetros de vía doble en placa. Este tipo de vía tiene la característica de que las traviesas sobre las que se apoyan los carriles van insertadas en placas de hormigón, en lugar de sobre el tradicional balastro. Es la solución habitualmente empleada en túneles de gran longitud y, a pesar de tener un mayor coste de construcción, su mantenimiento es más barato y facilita la operativa de vehículos técnicos y de emergencia.

Los dos túneles principales de la variante se pondrán en servicio simultáneamente con una configuración de ancho estándar e ibérico en el tubo este y de ancho ibérico con traviesa polivalente, en el oeste. De esta manera, ambas vías permiten el tránsito de trenes de viajeros y mercancías sin afectar a los tiempos de viaje. La traviesa polivalente en la vía oeste permite, además, el cambio a ancho estándar en fases posteriores de la explotación.

Todo ello permitirá la reducción del tiempo de viaje, el incremento de la capacidad y la regularidad, y el aumento del confort con unas condiciones óptimas de rodadura.

La inversión del montaje de la vía en la variante de Pajares ascendió a los 42,73 millones de euros, a los que hay que sumar otros 42,59 millones correspondientes al suministro de traviesas, carril, balastro y aparatos varios. Hay que tener en cuenta que para realizar estos trabajos se precisó de una logística de materiales muy compleja, debido a la longitud de los túneles, en los que un vehículo a motor no dispone de espacio para cambiar de sentido. Previamente al montaje, se preciso introducir en los dos tubos unas 76.000 traviesas y cien kilómetros de carril en barras de 270 metros de longitud, con un peso total de 6.000 toneladas. Además, fueron necesarios 52.000 metros cúbicos de hormigón. En los próximos días se procederá al suministro y tendido del tercer hilo de la vía este.

Una de las dificultades de estas labores pasa porque las traviesas se introducen y reparten mediante camiones, lo que exige que las vías no estén montadas en sus bocas. Pero el reparto de carril mediante trenes carrileros sí precisa de una vía montada hasta el túnel y que la solera esté libre de traviesas. Por eso, tuvieron que ser acopiadas en los andenes laterales. En esta obra, la galería de acceso de Buiza jugó un papel fundamental para realizar circuitos de entrada y salida unidireccionales para el reparto de materiales y el hormigonado de la vía en placa.