La Universidad de Oviedo, obligada a modificar los contratos del 30% de sus docentes

Villaverde mencionó tres figuras, en concreto. La primera, la de contratado doctor, que directamente desaparece en la LOSU y da paso a una figura similar, la de profesores permanentes laborales. Pero hay una diferencia importante entre ambas: serán las propias comunidades autónomas las que regulen los criterios de acreditación de estos profesores, algo que hasta ahora dependía de la agencia nacional, la ANECA, que marcaba las mismas normas para todos. Precisamente el Ministerio de Universidades acaba de hacer públicas las estadísticas del personal de las universidades españolas. Según sus cifras, la institución asturiana tiene 144 contratados doctores (en el curso 2021-22).

El equipo rectoral busca una solución «casi inmediata» para esta cuestión, ya que era la figura que la Universidad de Oviedo venía utilizando para estabilizar a «nuestros ayudantes doctores».

Precisamente a los profesores ayudantes doctores les afectan también los cambios de la LOSU. Hasta ahora, esta figura podía impartir hasta un máximo de 240 créditos. Con la entrada en vigor de la nueva ley el límite se pone en 180. La Universidad de Oviedo tiene 197 ayudantes doctores.

La tercera figura afectada es la de los profesores asociados, de los que hay 299 en la institución asturiana y entre los que la ley persigue, especialmente, acabar con la precariedad laboral. En este caso hay dos cambios importantes. Por un lado, y aunque siguen siendo contratos a tiempo parcial, pasan a ser indefinidos. Pero es que, además, también se rebaja el límite de créditos que pueden impartir, pasando de 180 a 120. La preocupación por los cambios en esta figura ha llevado incluso a un pronunciamiento conjunto del G-9, (el grupo que aglutina a las universidades públicas españolas que son las únicas públicas en sus respectivas comunidades). Este cambio, y otros incluidos en la ley, «incrementará los costes del sistema universitario sin que se vislumbren partidas económicas compensatorias, con el consiguiente riesgo de abocar a la universidad hacia la insostenibilidad financiera», advirtió el G-9 hace unos meses.

Pero es que tampoco a los propios afectados les ha gustado la ley. Temen que los concursos de méritos que deben convocarse para convertir sus contratos en indefinidos puedan suponer despidos y llevan varias semanas con movilizaciones por todo ello.

En total, por lo tanto, habría unos 640 docentes de la Universidad de Oviedo afectados de forma directa por los cambios, lo que supone aproximadamente el 30% de su personal docente e investigador. El curso pasado, la plantilla era de algo más de 2.200, siendo los más numerosos los profesores titulares, 766.