Tomé deja de utilizar las siglas de Podemos ante su inminente expulsión

Tomé, la única diputada de Podemos en el Parlamento, lleva desde el pasado mes de octubre pendiente de un expediente disciplinario interno. La Comisión de Garantías del partido le imputa más de una decena de infracciones muy graves y graves, por las que está suspendida cautelarmente de militancia, a la espera del periodo de alegaciones. La expulsión definitiva será comunicada a la diputada en breve, una vez que se han rechazado las alegaciones, según pudo saber EL COMERCIO.

La Comisión de Garantías le abrió un expediente tras acusarla de realizar críticas públicas a la anterior dirección autonómica del partido y a la cúpula nacional, de haber negociado los presupuestos autonómicos a espaldas de la dirección autonómica y de utilizar los fondos que el partido recibe por parte de la Junta General para contratar a personal sin pedir permiso a la ejecutiva, entre otros puntos. El equipo de Tomé ha enmarcado este expediente en «una purga iniciada ya hace meses por la dirección del partido contra el sector crítico» y, aunque ha defendido su papel como portavoz de Podemos en la Junta hasta hace poco, ahora se ha desmarcado de estas siglas. La diputada ha manifestado en numerosas ocasiones que no renunciará a su escaño, aunque es probable que la nueva dirección del partido, encabezada por Diego Ruiz de la Peña, reclame que dimita y entregue el acta.