La borrasca Aitor obliga a cerrar la basílica de Covadonga

La borrasca Aitor ha superado las previsiones en Asturias. La lluvia cayó incesante durante la madrugada de este jueves y continuaba a primera hora de la mañana, en la jornada que la Aemet anunciaba como la de mayor impacto para la región. Casi 75 litros por metro cuadrado acumuló Degaña, punto del Principado con mayor precipitación acumulada, según los datos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). La agencia sitúa la mayor racha de viento en los Picos de Europa, donde llego a soplar a 114 kilómetros por hora en Vega de Ario. Cabo Busto registró rachas de 109 y en Vega de Urriellu también superaron los 100.

El aviso amarillo por las fuertes lluvias continúa activo este jueves hasta el mediodía y la alerta por viento se alargará hasta las 15 horas. Tras la tormenta, que amainará de cara a la tarde, los peores pronosticos se trasladan a la costa asturiana, que estará en aviso amarillo por viento y oleaje hasta el viernes a las 20 horas. Durante esta jornada, aunque con menor intensidad, seguirá lloviendo en Asturias.

Sorprenden las altas temperaturas que ha dejado en el Principado el paso de Aitor. Hasta los 29 grados han llegado a registrar los termómetros, algo inusual para esta época y que dejará de ser la tónica de cara al viernes, cuando las temperaturas comiencen a descender. Durante esta jornada, las máximas no alcanzarán los 20 grados.

Hoy, por el momento, no se han reportado incidencias de consideración, si bien no conviene bajar la guardia, y sí mantener todas las medidas de seguridad y prevención posibles. Esto es lo que ha pensado el abad de Covadonga, David Cueto, que después de que esta noche se notasen goteras de cierta entidad en el interior de la basílica de Covadonga ha decidido cerrar el edificio a las visitas y el culto hasta que la situación se solvente.

Por otra parte, la Guardia Civil ha cerrado el acceso a los lagos de Covadonga, y recomienda extremar las precauciones en todo desplazamiento por Asturias, en especial en zonas de montaña y en la proximidad de la costa. Está especialmente desaconsejado caminar por sendas costeras o paseos marítimos, porque el viento racheado alcanza intensidades cercanas a los 80 kilómetros por hora en la costa.

En todo caso, la jornada de hoy no es la mejor para visitar el Santuario de Covadonga, ni la cordillera. La lluvia caída y que sigue cayendo a intervalos ha generado pequeñas riadas, especialmente notables en el recorrido interior del Jardín del Príncipe, cuyas escaleras parecían un pequeño arroyo esta mañana. Espectacular, eso sí, el chorrón bajo la gruta, como reportó el propio abad a EL COMERCIO, por la cantidad de agua caída por encima de la altitud a la que se encuentra la Cueva está siendo desaguada, en parte, a través del mencionado chorrón.

Así las cosas, y aún con la previsión de la Aemet de que a lo largo de esta tarde comiencen a mejorar las condiciones, es recomendable no desplazarse por zonas de montaña salvo estricta necesidad, sobre todo en lugares en los que sean probables los argayos, puesto que el terreno se ha cargado de agua y, como informa el alcalde de Somiedo, Belarmino Fernández Fervienza, «aunque no tenemos ninguna carretera cortada, han caído muchas piedras del monte a las calzadas. Ha llovido mucho», anotó, aunque también a intervalos el sol se ha dejado ver en este concejo montañero, mientras las nubes se siguen desplazando en altura a velocidades muy notables.

De hecho, la totalidad de la costa entre Finisterre y el País Vasco seguirá al menos hasta mañana en alerta amarilla por lluvias y vientos de intensidad siete, con probabilidad de alcanzar fuerza ocho. En el interior, la alerta es también amarilla para hoy en toda la zona asturiana de la Cordillera Cantábrica.

Por lo que toca a los ríos, la Confederación Hidrográfica tiene bajo vigilancia todas las cuencas asturianas, como siempre, pero sitúa en nivel amarillo buena parte de los cauces medios y altos, y tiene en nivel naranja la zona baja del Sella y la totalidad de los pequeños ríos orientales del Ereba y el Bedón, si bien en todos los casos la tendencia es a una disminución del aporte de agua.

La borrasca Aitor se prevé que vaya perdiendo fuerza en Asturias a partir del viernes por la tarde. Así, a las 20 horas, la Aemet no mantiene activa la alerta y el sábado lucirá por fin el sol en casi todo el Principado, aunque empañado por algunas nubes. Eso sí, habrá que cambiar chaquetina por abrigo, porque las temperaturas serán aún más frías que el viernes.

Mismo panorama tendrá la región durante la jornada del domingo, que aunque amanecerá nuboso, de cara al mediodía el cielo permanecerá depejado. Ls temperaturas remontarán ligeramente el último día de la semana.

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