Secciones
Servicios
Destacamos
GIOVANNA F. BERMÚDEZ / LUCÍA RAMOS / JUAN GARCÍA / ROSANA SUÁREZ
GIJÓN.
Sábado, 12 de diciembre 2020, 02:50
El último temporal que ha azotado la región sigue generando problemas en varios puntos del Principado. El principal foco de atención ahora está puesto en los caudales de los ríos, porque a las intensas lluvias caídas durante toda la semana se une el deshielo de la nieve en las cumbres provocado por la subida de las temperaturas ... . En la zona del oriente, el desbordamiento del río Deva afectó a las praderías de los alrededores de Panes. En el occidente, el río Pigüeña causó estragos a su paso por Belmonte de Miranda, tanto en la capital como en la localidad de Aguasmestas. Los cauces del Nalón y el Narcea, los que peor situación presentaron durante todo el día, mantuvieron en vilo a la comarca del Bajo Nalón por el temor a las inundaciones de las plantaciones de kiwi.
Ante la situación que presentaban los principales ríos de la región y su evolución previsiblemente desfavorable, la consejera de Presidencia, Rita Camblor, activó en la mañana de ayer el Plan Especial de Protección Civil ante Inundaciones del Principado de Asturias, en fase de preemergencia, lo que supone que desde el centro de Coordinación de Emergencias se realizará un seguimiento continuo de los parámetros hidrológicos, manteniendo el contacto con los organismos encargados de facilitar información para poder seguir la evolución de los caudales.
Los principales daños durante la jornada de ayer se registraron en la zona más alta de los ríos. En oriente el río Deva se desbordó por la mañana a su paso por Peñamellera Baja, afectando a la localidad de Panes, aunque según indicó el alcalde, José Manuel Fernández, no se generaron incidencias importantes y solo se inundaron algunos prados. También se hizo seguimiento en esta zona al caudal del río Sella que, pese a todo, no llegó a entrar en la fase de prealerta.
En el occidente también fueron los concejos del sur de la región los más afectados. El río Pigüeña se desbordó ayer a su paso por el concejo de Belmonte de Miranda, en la localidad de Aguasmestas y también en la capital, donde se produjeron los peores daños. Varios equipamientos públicos de la villa se vieron afectados por lo que el Ayuntamiento, en colaboración con el 112 Asturias, pidió ayer «máxima precaución» a los vecinos y cerró al paso el puente peatonal entre el edificio sociocultural y el colegio, tras inundarse el polideportivo, las piscinas y parte del aparcamiento ubicado entre las viviendas sociales y el centro de salud. Además, los vehículos aparcados en el parking del polideportivo tuvieron que ser retirados por miedo a que el muro no resistiese la fuerza del agua. Además, la crecida descalzó una torre de alta tensión entre entre Silviella y Vigonzález, cuyos cables cruzan la AS-227. Sin embargo, la tendencia de este río a última hora de la tarde parecía ser más favorable, aunque se mantuvo un plan B de evacuación por parte del ERA para la residencia de mayores.
Noticia Relacionada
El río sobre el que a última hora de la tarde de ayer se mantenía la alerta era el Narcea, que provocó por la mañana inundaciones en Cangas, obligando a cerrar el Paseo del Vino entre Santiso y las Barzaniellas, así como una parte del Prao del Molín. En su confluencia con el río Nalón se mantenía también la máxima alerta por el riesgo alto de desbordamientos que pudiese afectar a las plantaciones de kiwi de esta zona. El alcalde Pravia, David Álvarez, visitó las localidades de Quinzanas y Forcinas por la mañana, confirmando el «riesgo alto» de riadas. Los productores de kiwi de la zona estuvieron pendientes de los niveles de los ríos hasta última hora de la tarde. En las fincas más bajas, en la localidad de Santianes, llegó a desbordarze el Nalón, aunque, según aseguraban los propietarios de los terrenos, su mayor miedo era lo que podría suceder durante la noche.
Pero el temporal no sólo dejó consecuencias en los ríos, también causó numerosos argayos en distintos puntos de la región. En Ribadesella, la madrugada del viernes, un gran desprendimiento de tierra cayó sobre la rampa de acceso a la playa de La Atalaya, en el casco urbano de la villa. Además, los técnicos municipales detectaron tres hundimientos en la carretera RS-2 entre la Piconera y Sardalla. En Cangas del Narcea seguirán durante todo el fin de semana realizando trabajos en la carretera AS-29, afectada por otro argayo. Y en Salas, la AS-15, a la altura del embalse de Calabazos continúa cerrada al tráfico.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.