Secciones
Servicios
Destacamos
E. C.
GIJÓN.
Martes, 7 de mayo 2019, 02:59
Tres hembras con una cría cada una. Y otras tres, con dos crías por cabeza. Somiedo es la capital osera de Asturias. Según los registros del Fondo para la Protección de los Animales Salvajes (Fapas), el concejo aglutinaba el año pasado el ... mayor volumen de osas parturientas, con seis hembras y hasta nueve crías. Le siguen Belmonte, con tres hembras y seis crías (una de las osas era madre de tres); Proaza, con dos hembras y tres crías; Belmonte y Teverga, que clonan cifras: dos hembras y tres crías, en un ranking que cierra Grado, con una hembra localizada a cargo de sus dos oseznos.
De acuerdo a las estadísticas del Fapas, Somiedo es la cuna de la reproducción osera en Asturias desde 2012, cuando se registraron 10 ejemplares. El pico de la serie, que se realiza cada dos años ya que, según explica la entidad, «las osas nunca paren durante dos años consecutivos a no ser que hayan perdido a sus crías», llegó en el periodo 2015-2016, con 16 ejemplares. El año pasado, la cifra bajó a 15. Le siguen en intensidad Belmonte, que llegó a siete ejemplares en 2016 y bajó a cinco el año pasado, y Grado, con un único ejemplar desde 2014.
A falta de los registros de este año, el Parque Natural de Somiedo está demostrando esta primavera su protagonismo como lugar de residencia osera. Unas imágenes captadas en la zona evidencian la presencia de varios ejemplares, incluso una pareja en plena cópula.
«Cada vez es más fácil avistarlos», comenta Pepe Caunedo, el aficionado que registró el encuentro. «El viernes vimos tres osos, el sábado dos, y el domingo desde el mirador del Presidente, a menos de un kilómetro divisamos siete», describe. Mientras el macho se dedicaba a la cubrición, en la misma ladera pudo observar a otros dos osos, una pareja de esbardos con su madre. Caunedo, que difunde las imágenes como reclamo turístico de Somiedo, lleva años «enganchado» a la caza de imágenes que ofrece el Parque Natural. «Es espectacular, cuando no ves a un oso encuentras a un rebeco», afirma. Estos meses son propicios para ello. Tras la prolongada hibernación, en la que los plantígrados pasan meses de inactividad, las altas temperaturas hacen que estos ejemplares salgan de sus refugios.
Este hecho, que se ha convertido ya en un reclamo turístico para aquellos curiosos que desean avistar a los animales, permite a los más afortunados ver escenas cotidianas de la naturaleza como el juego de una osa adulta con su osezno o el apareamiento de dos ejemplares adultos en plena época de celo.
No obstante, zonas como Fuentes del Narcea han tomado medidas para evitar que la presencia de turistas genere problemas a la población osera. La restricción temporal en esa área finalizará el próximo 15 de junio.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.