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El brote de tuberculosis bovina que afecta a los ganaderos de Tineo y las medidas de contención adoptadas por el Gobierno del Principado se convirtieron esta mañana en la Junta General en todo un debate de índole político. Mientras los ganaderos se manifestaban ... contra la gestión de la Consejería de Medio Rural a las puertas de la Junta, en su interior se celebraba un pleno extraordinario a propuesta de PP y Vox para abordar este tema que comenzó con una explicación técnica por parte del consejero del ramo, Marcelino Marcos Líndez, pero acabó con reproches políticos cruzados e incluso ataques personales.
Aunque la oposición había requerido que fuera el propio presidente del Principado quien «diera la cara» en sesión plenaria, el Ejecutivo asturiano ya había anunciado que comparecería el consejero, quien reconoció el «papelón» por ser precisamente su concejo, Tineo, el afectado por esta crisis. «Pero tomamos las decisiones por responsabilidad con independencia de que nos puedan partir el corazón», defendió ante una tribuna de invitados repleta de ganaderos críticos con su gestión. Al consejero le tocó explicar nuevamente las medidas adoptadas en base a criterios científicos y comparó su respuesta «contundente» a la adoptada por el Gobierno del Principado durante la pandemia para control la expansión del Covid. Y defendió reiteradamente la necesidad de aplicar los protocolos establecidos para mantener el status sanitario del que disfruta el sector en Asturias. «Un gobierno responsable, y lo demostramos cuando la covid, no puede mirar para otro lado en un asunto que también tiene riesgos para la salud pública», sentenció.
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El consejero acusó a la oposición de actuar de forma «irresponsable» y «bochornosa» por tratar de «politizar» un problema que, advirtió, puede tener consecuencias para la salud pública. «En la utilización política y en el barullo se mueven como pez en el agua. Sin embargo, el rigor que demuestran y la solidez de su discurso tiene unos cimientos de plastilina», reprochó el también diputado, quien hizo cierta autocrítica reconociendo que «no somos infalibles» y que hay margen para mejorar la gestión. Eso sí, cargó duramente contra el PP por «cambiar de criterio» con respecto a la postura de esta formación en otras comunidades y en otros momentos sobre los protocolos de actuación y dejarse llevar por el discurso de Vox.
Del otro lado, las fuerzas de la oposición, especialmente los grupos parlamentarios proponentes del pleno, PP y Vox, pero también aunque con otro tono el diputado de Foro, acusaron al Ejecutivo de actuar de forma «desproporcionada» contra la cabaña ganadera, generando «alarma social» y eludiendo su responsabilidad en relación con el control de la fauna salvaje, como principal foco del problema. «Sólo toman decisiones sobre el último eslabón de la cadena, sobre el fácil», denunció el diputado popular Luis Venta, quien negó que estemos ante un problema de salud animal ni de salud pública. «Lo que está en juego es el futuro de un concejo», alertó el parlamentario, que también aprovechó su intervención para avanzar el contenido de la iniciativa legislativa que registrará el grupo parlamentario popular en este sentido. Concretamente, propondrán dejar exentas de tributación en el IRPF las indemnizaciones de pólizas de seguros pecuarios y las ayudas públicas por sacrificio, el valor de venta de los animales para sacrificio en el matadero o industria cárnica por sacrificio obligatorio y la indemnizaciones por daños de fauna salvaje. El consejero de Medio Rural se mostró receptivo con la propuesta.
La portavoz de Vox, Carolina López, acusó al equipo de Adrián Barbón -quien se ausentó del hemiciclo cuando López tomó la palabra- de generar «alarma innecesaria» y de «marcar el futuro de Tineo para siempre», dirigiendo sus críticas directamente hacia el consejero. «De tinetensa a tinetense, es usted una deshonra políticamente hablando para el concejo y para todo el medio rural», espetó. Para Vox lo ocurrido en Tineo es una «estocada al campo asturiano» que obedece a la influencia que ejercen en el Principado los «ecologistas radicales de salón» y que es consecuencia, además, de no actuar ante el «foco real» del problema que, en su opinión, es la fauna silvestre. Concluyó la diputada instando al Ejecutivo a actuar ante la corrupción política con el mismo protocolo que aplica ante los casos de tuberculosis, «apartando a todo el partido si se detecta un solo caso, y a hacer un »vacío sanitario« dentro de la consejería.
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