Llanera se come la calle en honor a San Isidro

Se llevaba esperando varios años, y cada uno pedía por dentro al cielo que el agua no estropease la fiesta. Finalmente el sol brilló en Llanera, y los vecinos de Posada y todos los simpatizantes de las fiestas de San Isidro que se desplazaron hasta el parque Cuno Corquera pudieron celebrar la vuelta de la tradicional comida en la calle.

Tras un par de años en los que fue la pandemia la que había imposibilitado la celebración de este gran día, enmarcado en las tradicionales fiestas populares, había ganas de retomar el clásico. «Salir a comer con todos los vecinos, compartir el espacio y la comida, me parece una de las mejores fiestas que se pueden celebrar en cualquier sitio», comentó Josefa Suárez, vecina de Posada, que acudió en familia a la cita, con sus hijas y nietos.

Una que congregó a gente de todas las edades aprovechando el buen día para salir a las calles. «Llevaba toda la semana pensando que iba a llover y me preocupaba que después de dos años de pandemia se chafase, pero parece que hemos tenido suerte y en el último momento nos han regalado este pedazo de día de sol», celebró el joven José Suárez, mientras se sentaba a la mesa con los suyos.

El día aguantó a pesar de las tímidas gotas que cayeron durante la tarde, aunque los vecinos de Llanera, sobre todo los más pequeños, pudieron disfrutar de actividades especialmente diseñadas para ellos. A ese respecto, la organización había preparado una batería de juegos que dieron continuación a las muestras de actividades tradiciones que durante todo el fin de semana se organizaron en el parque Cuno Corquera y que acompañaron la celebración del tradicional mercado.

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