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«Nos despertaron tres golpes que sonaban como una maza, pensamos que se nos venía el techo encima». Son las palabras de inquietud de varios vecinos de la calle Marquesa de Canillejas, en pleno centro de Pola de Siero, después de que esta madrugada un grupo de atracadores asaltase Casa Vitorín, empleando el método del 'alcantarillazo'. Según ha podido saber este diario, no lograron llevarse nada del interior y a pesar de que la Policía Local apenas tardó cuatro minutos en intervenir, lograron huir.
Los hechos ocurrieron pasadas la una de la madrugada. Los ladrones llegaron a la zona en un vehículo que, según las primeras hipótesis, apostaron a varios metros del negocio hostelero. Fue entonces cuando decidieron arrancar una tapa de alcantarilla próxima al local, que se encontraba entre un BMW de color gris y un Volkswagen blanco.
En apenas unos segundos, propinaron tres golpes a uno de los escaparates laterales de vidrio de la sidrería, para acceder sin problemas al interior. Fueron los gritos de los vecinos los que, al parecer, advirtieron a los cacos de que habían sido descubiertos, por lo que emprendieron su marcha dejando «intactas» la máquina de trabajo; la tragaperras y la registradora.
No es el primer suceso que se produce recientemente en el centro de la capital polesa. Hace nueve días, dos encapuchados asaltaron una tienda de telefonía en una calle paralela a donde se produjo el suceso esta madrugada. En esa ocasión, tampoco pudieron llevarse nada gracias a las fuertes medidas de seguridad del establecimiento, que ya había sufrido un robo el año pasado, y uno de ellos fue detenido horas después por la Policía.
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