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JUAN VEGA
PARAES.
Domingo, 14 de junio 2020, 00:41
El alcalde de Bimenes, easturianista Aitor García Corte, ha presentado su dimisión como presidente de la Mancomunidad Comarca de la Sidrpor motivos de salud. El mandatario formalizó la decisión el viernes, tras varios meses padeciendo episodios de estrés que le obligaron a recibir asistencia sanitaria. ... Su marcha, tras casi un año en el cargo, también deja vacante el puesto de la gerencia de la mancomunidad, ya que desempeñaba ambas funciones al mismo tiempo.
Será en los próximos días cuando se decida quién tomará su relevo para representar a los seis ayuntamientos (Bimenes, Nava, Sariego, Villaviciosa, Colunga y Cabranes) que integran la asociación de municipios, cuyo objetivo es garantizar los servicios sociales de sus casi 30.000 habitantes.
Durante sus meses al frente, la mancomunidad sacó adelante un presupuesto de 2,75 millones de euros, casi 230.000 euros más que en 2019. Además, también se acordó por unanimidad la subida de un 0,25% de las retribuciones de sus casi setenta trabajadores.
El pasado mes de diciembre, García dejó entrever que su intención era aumentar, en estos cuatro años, un 2,4% el salario de los empleados. «Nuestra prioridad, como es lógico, es potenciar el área de servicios sociales, lo que incluye la atención y asistencia a domicilio para las personas mayores», añadió.
García fue elegido presidente para los próximos cuatro años el pasado 12 de agosto, tras obtener mayoría en el Pleno constitutivo, con el apoyo de los cinco vicepresidentes, los alcaldes del resto de concejos. En ese momento, el concejo yerbato era el único de los miembros que nunca había dirigido este órgano supramunicipal desde su constitución en 1999.
No es la primera vez que un presidente de la mancomunidad presenta su dimisión. Precisamente, García relevó en el cargo a la alcaldesa de Colunga, Sandra Cuesta, quien a su vez había sustituido a su compañero Rogelio Pando, tras su inesperada salida en octubre de 2018.
Hace cinco años, la Mancomunidad atravesó una crisis que a punto estuvo de provocar su disolución. Finalmente se logró reconducir la situación y uno de los acuerdos alcanzados fue que la presidencia fuera rotatoria para no discriminar a ningún concejo y que todos tuvieran la oportunidad de liderar este órgano.
Sin embargo, la crisis del coronavirus augura tiempos difíciles para la Mancomunidad, que tendrá que reajustar sus prioridades y, por ende, realizar modificaciones en sus planes para poder seguir garantizando las necesidades de todos sus habitantes en 2021.
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