El sector turístico urge un plan de ayudas tras «el verano menos rentable en años»

Una realidad que Otea no niega, pero que dice no sirve «para salvar el año». Para que el sector turístico asturiano sea sostenible todo el año es necesario mejorar su eterna asignatura pendiente: la ocupación media. «Estamos en una tasa de ocupación anual del 46%», advirtió Álvarez Almeida. Una tasa muy por debajo de la media del país y de los parámetros de rentabilidad. «Para lograr la sostenibilidad de un negocio, lo normal es que la ocupación media anual debe estar por encima del 50%. Pero con la actual subida de costes, esa cifra sube a un 60%», explicó Fernando Corral.

Tanto el presidente como el vicepresidente de Otea ofrecieron ayer estos datos en una rueda de prensa en la que participaron los portavoces de todos los sectores que aglutina la entidad. Junto a ellos estuvieron Javier Martínez, vicepresidente y experto en restauración; Jaime García, de Arca (turismo rural) y Tony Amieva, de Campings de Asturias.

Ante una de las joyas del prerrománico asturiano, San Miguel de Lillo, a la que llegaron en el autobús turístico implantado este año por el Ayuntamiento de Oviedo, todos los directivos de Otea coincidieron en percibir una caída del gasto turístico, especialmente en la restauración. «El buen tiempo y la proliferación de actividades al aire libre ha hecho que baje el consumo en hostelería», explicó Javier Martínez.

Y si ya era difícil para el sector salir adelante sin la cuota necesaria de ocupación media y con un gasto turístico a la baja, el remate ha sido «la subida de las materias primas y el combustible». Según explicó Álvarez Almeida, «en mayo ya notamos un 53% de subida» en los consumibles, «pero es que llegamos a incrementos de la luz de un 222% y de gas que superan del 180%». Para acompañar sus cifras mostró la factura de uno de los socios de Otea. «En 2021 pagó de electricidad en julio y agosto 1.677 euros. Este año, 6.486 euros. Una diferencia de 4.800 euros de un año a otro».

Por ello, Otea pide «un plan de ayuda al sector» a la vez que reclama la coordinación de los diferentes estamentos de la Administración regional. «Es importante que Patrimonio nos permita ofrecer más terrazas, que es lo que el público quiere», dijo Álvarez Almeida.

Una coordinación que pasa «por la Viceconsejería de Turismo». Almeida planteó la necesidad de «un plan de formación, hemos visto todo el verano los problemas de personal, y hay que hacer un plan de transporte turístico para Asturias». En esa línea, y ante un invierno en el que el aeropuerto de Asturias ofrecerá su mayor oferta aérea de la historia, Corral precisó: «Es necesario una oferta de vuelos estable que permita hacer programaciones».