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ELENA RODRÍGUEZ
GIJÓN.
Martes, 1 de septiembre 2020, 01:59
Serán las autoridades sanitarias las que determinen la vuelta a clases de los universitarios que enfermen de Covid-19.
Así lo estipula el protocolo consensuado ayer entre el ministerio y las comunidades ante el inicio del año académico, en el que el apartado de cómo ... actuar ante un caso sospechoso o positivo durante coronavirus es el más novedoso. En primer lugar, el departamento de Manuel Castells establece que cada universidad deberá tener un responsable global para gestionar estas actuaciones y cada facultad, una persona de referencia. También habrá que definir los espacios de aislamiento a los que habrá que trasladar a los estudiantes que presenten síntomas. Tendrán que estar bien ventilados y contar, como mínimo, con una papelera de pedal con bolsa para tirar la mascarilla y pañuelos desechables. Después, se le colocará al alumno una mascarilla quirúrgica y la persona que lo acompañe también deberá colocársela.
Mascarilla en todos los espacios. Toda la comunidad universitaria deberá utilizarla el tiempo que permanezcan en los centros, aunque se respeten las distancias.
Distancia de 1,5 metros. Aunque se use mascarilla, en el aula se respetará la distancia de seguridad. Se pasará a la docencia 'online' o por turnos si no se cumple este requisito.
15 minutos de ventilación. Al inicio y al final del día, en cualquier espacio y antes y después de cada clase se ventilará el aula 10 o 15 minutos. Si se puede, mejor las ventanas abiertas.
Reuniones de docentes a distancia. Se realizarán mediante métodos no presenciales siempre que sea posible.
Salas de aislamiento y cuarentenas. Las universidades contarán con sala de aislamiento para casos sospechosos. Si se confirma el diagnóstico y tras el periodo de cuarentena, Sanidad decidirá cuándo volver.
Salidas escalonadas, mamparas y evitar ascensores. Si no es posible mantener la distancia, se instalarán mamparas para atender a los usuarios. Las salidas y entradas serán escalonadas y se pide no usar el ascensor.
El alumno tendrá que llamar al centro de salud o al teléfono de referencia de la comunidad autónoma para ver qué indicaciones tiene que seguir. En el caso de gravedad, serán los responsables de la gestión de crisis los que «se pongan de inmediato en contacto con el 112».
¿Qué pasos habrá que dar después? El estudiante deberá permanecer aislado en su domicilio hasta disponer del resultado de las pruebas diagnósticas. En el supuesto de que se confirmase el positivo, «no debe acudir al centro y debe permanecer en aislamiento domiciliario hasta transcurridos tres días del fin del cuadro clínico y un mínimo de diez días desde el inicio de los síntomas. Y, como se decía, no podrá incorporarse a la actividad académica hasta que sea indicado por las autoridades sanitarias.
El protocolo también alude a los contactos estrechos. Una vez que se confirme el diagnóstico del alumno y en colaboración con los 'responsables Covid' de la institución, se procederá a hacer un estudio de aquellos compañeros y miembros de la comunidad universitaria que tuvieron contacto con él habiendo estado a dos metros de distancia durante quince minutos y desde las 48 horas antes del inicio de los síntomas hasta que fue aislado. Una vez detectado, deberán estar en cuarentena y dejar de asistir a las actividades presenciales, sean éstas en la universidad o fuera de ella, hasta no acabar la cuarentena.
Se procederá a hacerles pruebas PCR, pero independientemente del resultado, «la cuarentena deberá durar catorce días, pues aunque en ese momento no sea positivo, puede desarrollar la enfermedad a lo largo de esa franja de tiempo». Durante el aislamiento tendrán derecho a recibir la docencia correspondiente de forma no presencial, «siempre atendiendo a las especificidades de la asignatura». Según el ministerio, en el caso de que se constate que hay un elevado número de estudiantes afectados, la decisión de cerrar deberán tomarla «los responsables de la universidad y los de Política Sanitaria y Universitaria».
El ministerio determina también el uso obligatorio de la mascarilla por parte de la comunidad universitaria todo el tiempo que estén en los centros y en todos los espacios, aunque se respeten las distancias. En este sentido, endurece la vuelta a las aulas, pues inicialmente, solo la había reclamado para cuando no pudiese asegurar el 1,5 metros de separación. La Universidad de Oviedo ya había indicado «utilizarla en todo momento».
El plan de contingencia de la institución asturiana recogía también la ventilación frecuente, como ahora solicita el ministerio, que pide que se ventilen las aulas «entre diez y quince minutos» antes y al acabar las clases. El ministerio especifica que este mes se conocerá qué cantidad de los 400 millones para la Educación Superior se destinará a cada comunidad y en qué fecha.
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