Salud promete a las comarcas que no habrá más derivaciones de pacientes por el mapa sanitario

«Dice que no va a haber más derivaciones a los centros de referencia. Pero es que más de las que ya se están produciendo no se puede», claman desde el occidente asturiano, con dos hospitales comarcales -el de Jarrio y el de Cangas del Narcea- muy mermados de servicios y especialistas. Para muchas consultas y pruebas, los vecinos deben desplazarse a Oviedo, Gijón y Avilés. Cuentan que un desplazamiento en taxi hasta el HUCA puede llegar a costarles 150 euros, ida y vuelta.

Saavedra precisó que el borrador del nuevo mapa sanitario «es un documento básico a partir del cual empezaremos un proceso participativo» y, por tanto, está abierto a las propuestas de los alcaldes. Ayer, la reunión fue colectiva y se celebró en la sede de la Federación Asturiana de Concejos. Pero, a partir de hoy, la consejera de Salud empezará a recorrer las distintas áreas sanitarias de la región para mantener encuentros 'in situ' con los alcaldes de cada zona. El objetivo: llegar al máximo consenso posible.

No va a ser tarea fácil, porque se parte con el rechazo de los ayuntamientos del Partido Popular, que en las últimas elecciones autonómicas y municipales ganó un mayor peso territorial en Asturias. Aun así, la consejera de Salud insistió en que «hay que sentarse y escuchar». Actualizar la gestión de la sanidad pública «es algo tan importante, que no podemos tener actitudes inmovilistas, sino que debemos llegar a acuerdos y ser dialogantes para poder avanzar», sostuvo Concepción Saavedra, en un intento de limar asperezas. La respuesta desde las alcaldías populares: «No criticamos el mapa porque somos del PP. Lo criticamos porque nos quieren hacer ver lo que no hay. Si tan bien va a funcionar todo con lo que proponen, es una pena que no lo hubiesen hecho antes».

El nuevo mapa sanitario concentra la gestión de la sanidad pública asturiana en tres grandes áreas, en lugar de las ocho actuales. Los concejos del noroccidente se fusionarán con la comarca de Avilés, siendo hospital de referencia el San Agustín (área de salud Occidente-Costa). El suroccidente, por su parte, se anexionará a una estructura de gestión que tendrá su epicentro en el HUCA y que incluye a Oviedo, zona central y la cuenca del Caudal (área Centro-Occidente). Y el oriente se integrará en la misma demarcación sanitaria que Gijón y la cuenca del Nalón, siendo su hospital 'madre' Cabueñes.

En la reunión de ayer, se expusieron las líneas generales de este nuevo modelo de gestión sanitaria, haciendo hincapié en las cuestiones que más preocupan a los alcaldes de las zonas periféricas. «Los usuarios van a tener su mismo centro de salud y hospital comarcal. La diferencia es que se reducirá la burocracia y podrán acceder a un circuito asistencial más amplio», señaló la consejera.

También apuntó, como avances que revertirán en una mejor atención asistencial, su intención de incentivar los puestos de difícil cobertura y el hecho de que los profesionales de los centros sanitarios comarcales, «al estar en espacios de gestión y conocimiento más amplios, mantendrán relación con otros servicios y no perderán el contacto con las nuevas técnicas y habilidades. E incluso mencionó el ahorro que se derivaría de centralizar la compra de suministros, materiales y medicamentos. Un ahorro, que según se ponía ayer sobre la mesa, se destinará, por ejemplo, a mejorar las condiciones de los profesionales sanitarios que tanta falta hacen en algunas zonas.

En torno a 50 ayuntamientos, de los 78 existentes, estuvieron ayer representados en la reunión que la plana mayor de la Consejería de Salud celebró en la sede de la Federación Asturiana de Concejos. Se escuchó más que se intervino, a la espera de que la máxima responsable sanitaria del Principado tome nota sobre el terreno de las necesidades y sugerencias de cada alcalde. Empezará hoy mismo, en Cangas del Narcea, donde tomarán la palabra los municipios del suroccidente, especialmente críticos con la atención sanitaria que reciben. Tanto, que hace apenas dos semanas los vecinos convocaban una movilización para denunciar las carencias del hospital Carmen y Severo Ochoa.

Ayer, la presidenta de la Federación de Concejos, Cecilia Pérez, optó por calmar las aguas e hizo un llamamiento al consenso: «Se nos presenta una oportunidad única de modernizar nuestra sanidad y todos tenemos que hacer un esfuerzo por entendernos». La alcaldesa socialista de El Franco confía en que se cumplan las expectativas de la Consejería de Salud y que el nuevo mapa sanitario permita subsanar los problemas actuales, que «vienen de un modelo de hace 40 años que, evidentemente, se ha quedado desfasado».

Pérez abundó que «no se cerrará ningún centro sanitario comarcal» y puso el foco en «algo que para mi es fundamental»: la Atención Primaria. En su opinión, «hay muchas cosas que se pueden hacer» desde este nivel asistencial para mejorar la sanidad pública asturiana. De hecho, el borrador del nuevo mapa sanitario recoge el compromiso de «darle una mayor visibilidad», con una estructura directiva equiparable a la de Atención Hospitalaria.

«Hay tantos avances que podemos aprovechar para mejorar la asistencia sanitaria», ponía en valor la presidenta de la Federación de Concejos. «Estuvimos tiempo sin servicio de rehabilitación. Cuando un vecino pasó consulta con el traumatólogo y le contó que tenía que pagarse el fisio, va y le dice que en Youtube hay vídeos con ejercicios que le pueden venir muy bien. ¿Será eso la telemedicina de la que hablan?», ironizó un alcalde menos optimista.