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MIRIAM SUÁREZ
GIJÓN.
Sábado, 11 de diciembre 2021, 01:41
De los 51 focos de contagio que están activos en Asturias y que han dado lugar a 485 nuevos positivos, «la mayoría se produjeron en centros educativos y comidas multitudinarias», y «algunos en el medio laboral y en centros sociosanitarios». Ese es el panorama epidemiológico ... que ayer dibujó el consejero de Salud, Pablo Fernández Muñiz, poco antes de que el Consejo de Gobierno aprobase como única medida -al menos de momento- la obligación de instalar medidores de CO2 en la hostelería y en los gimnasios.
Dicha obligación se extiende también a todos los espacios interiores de uso público donde se congreguen simultáneamente más de 500 personas. Con este acuerdo, el Gobierno autonómico pretende reducir el riesgo epidemiológico en lugares cerrados y muy concurridos, donde no se puede garantizar el uso permanente de la mascarilla. La medida entró vigor ayer a medianoche, aunque, según anunció el consejero de Salud, «se dará un margen de una semana» a los afectados para que puedan cumplir con esta nueva indicación del Principado.
Esta moratoria de siete días se concederá siempre y cuando los dueños de los locales justifiquen que han adquirido los monitores y están a la espera de su instalación. El medidor de CO2 deberá estar colocado en un lugar visible y los dueños de los locales tendrán que actuar en cuanto se superen las 800 partículas por millón (ppm), bien ventilando adecuadamente o bien reduciendo el aforo.
No solo eso. El acuerdo que ayer alcanzó el Consejo de Gobierno contempla, además, una serie de recomendaciones. Por un lado, se aconseja a ludotecas, academias o escuelas de 0 a 3 años, donde los usuarios no tienen obligación de usar la mascarilla, queinstalen también medidores de aire. Por otro, que las personas que no están vacunadas «se abstengan» de visitar centros sanitarios y sociosanitarios, ya que su capacidad para transmitir el virus es mucho mayor, aparte de presentar un mayor riesgo de sufrir complicaciones.
En tercer lugar, «recomendamos que todos aquellos eventos que pueden realizarse telemáticamente no se hagan de forma presencial», expuso el consejero. Pese a que Asturias ha elevado su nivel de riesgo por transmisión de coronavirus, no se contemplan más medidas a corto plazo medidas drásticas, aunque «no descartamos nada» si la evolución epidemiológica sigue subiendo peldaños en el ranking epidemiológico. Los responsables sanitarios confían, no obstante, en que el cumplimiento de las normas básicas de protección -«estamos maximizando las inspecciones»- y la tercera dosis de la vacuna en los mayores de 60 años sean suficientes para frenar el alto ritmo de contagios.
«Los brotes existentes han generado 18 ingresos cuando hubiesen sido cientos si la mayoría d ela población no hubiese estado vacunada», recalcó Fernández Muñiz. De ahí que se haya decidido cambiar el protocolo ante un nuevo positivo. En el actual contexto epidémico, «ya no son cuarentenables ni objeto de baja laboral los contactos estrechos vacunados», aunque se les exigirá extremar la protección y se les agilizará la realización de una PCR. En el caso de los contactos estrechos no vacunados, sí deberán guardar cuarentena.
El nuevo procedimiento agilizará «al máximo» el tratamiento de los contactos estrechos mayores de 65 años y menores de 12, colectivos en los que está teniendo un mayor impacto la sexta ola. El resto no recibirá llamada de los rastreadores, sino que se les contactará mediante un mensaje de móvil.
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