Transportes eleva a 1.500 millones el Plan de Cercanías y asume que parte de las obras se harán tras 2030

Hoy el secretario de Estado de Transportes, David Lucas, llegó acompañado de la plana mayor del ministerio para poner al día la situación de esos compromisos. Actualizar el Plan de Cercanías 2017-2025 ha supuesto ampliar su lista de trabajos pendientes y coste. Los cerca de 600 millones que anunció hace seis años el ministro Íñigo de la Serna han ido creciendo y ahora la cuenta de todo lo que cabe hacer para poner al día la red sube hasta los 1.491,8 millones. El incremento se explica en parte porque la versión anterior del plan recogía necesidades pero sin estudios que fueran perfilando su coste y ahora hay una parte significativa de las obras y mejoras en planificación, estudio, redacción de proyecto o preparación de licitación.

Agrupar esos conceptos es lo que permitió al secretario de Estado defender que ya están «movilizados» 974,9 millones en Asturias, una suma enorme que solo se entiende si a lo hecho se le añade lo que está en los despachos en maduración. Según la presentación que utilizó Lucas, la realidad es que cinco años después de la presentación del plan inicial, las actuaciones terminadas en materia de infraestructura lo son por un importe de 30,4 millones, lo que equivale al 3% de este capítulo.

El plan actualizado amplía la lista de trabajo pendiente, pero también lo que habrá que esperar para verlo acabado. Hay 129 actuaciones cuya prioridad les lleva a ser reconocidos como compromiso «a corto plazo» y para ellas «el horizonte temporal es el de 2025», indicó el secretario de Estado. Estos trabajos están estimados en 515 millones, lo que implica un tercio del total. De las 129 obras a corto plazo por ahora solo están en ejecución 35.

Otra lista de mejoras han quedado encuadradas en las prioridades «a medio plazo», y para ellas el horizonte de materialización «sería entre 2028 y 2030», indicó el secretario de Estado. Son 48 actuaciones por un importe de 328 entre las que se cuentan la renovación integral de los tramos Lena-Oviedo y Oviedo-Gijón, los túneles del Padrún y los de Villabona. Para el largo plazo, con obras ya en la siguiente década, quedarían trabajos en infraestructura por 286,4 millones.

El calendario se va dilatando. Para el plan de vías de Gijón la expectativa es contar con un proyecto global en el segundo semestre de 2025. La nueva estación ampliada de Pola de Lena, que adaptará las instalaciones a la llegada de la alta velocidad, será una realidad en el primer semestre de 2026.

En lo tocante a los trenes, Lucas confirmó la noticia adelantada por EL COMERCIO, según la cual ya se estaba aplicando el método comparativo para diseñar las unidades pedidas a CAF. El inicio de la fabricación lo ubicó «a finales de este año». La entrega de las primeras unidades sí las mantuvo «para 2026», sin precisar cuándo acabaría la empresa vasca de completar la serie que se le encarga. Sí concretó que los 'Acuerdos de la Castellana' van a suponer que la red de ancho métrico asturiana reciba un total de 35 nuevos trenes, en vez de los 10 que se habían comprometido. Para dar ese salto, se activará la cláusula que tiene el contrato de CAF que permite ampliar la remesa en siete unidades y Renfe tendrá que licitar nuevos contratos. «Podrá ser a lo largo de los próximos meses, pero no me atrevo a dar una fecha», asumió Lucas. Tampoco quiso darla para la apertura de la variante de Pajares, anuncio que reserva para el mes que viene, «cuando las pruebas estén más maduras».

Los avances, unido al nombramiento de un comisionado para los planes de cercanías, tuvieron buena acogida en el Principado. El consejero de Medio Rural y Cohesión Territorial, Alejandro Calvo, celebró que se inicie «una nueva etapa con una hoja de ruta clara». «Seremos exigentes pero también colaboradores». «Tenemos mucho por hacer». Calvo lanzó un guiño a la alcaldesa de Gijón, Ana González: «Es de justicia señalar que la estación intermodal abre la puerta a un cambio de movilidad en la región y al modelo de ciudad de Gijón». Para el consejero la versión del Plan de Cercanías presentada en 2017 «era un power point», mientras que lo de ahora es «un desarrollo exhaustivo con proyectos y presupuesto. Debe ser un antes y un después».

El secretario de Estado, David Lucas, defendió que el documento evidencia «la vocación del Gobierno de España de afrontar la mejora de las cercanías en Asturias y Cantabria». «Creo que nunca se habían hecho unos planes tan ambiciosos», destacó.

El consejero de Medio Rural, Alejandro Calvo, ha querido lanzar un mensaje de contundencia sobre los incendiarios. «Mostramos nuestra total condena ante lo que está sucediendo». En una rueda de prensa para hablar de las cercanías, Calvo hizo un aparte para asegurar que los focos «son provocados y perseguidos por las fuerzas de seguridad». Según recordó, causar un incendio forestal «es un delito grave, con penas de cárcel y multas cuantiosas. Debe ser perseguido con toda dureza y máxime cuando hay circunstancias meteorológicas como las que hay».