Renfe inicia la entrega de abonos gratis con colas y confusión en las estaciones asturianas

Paula Álvarez, por ejemplo, vive en Pola de Lena y usa el tren para trabajar en Oviedo. «Decían que tenías que registrarte en su web, lo estuve intentando pero no me dejaba», explicaba, mostrando desde su teléfono móvil cómo la página de Renfe le invitaba a pinchar en un 'registrate' que no respondía. En un primer momento la compañía informó que para acceder a los abonos el usuario se tenía que registrar, luego resultó que si ya se habían dado los datos a Renfe en ocasiones anteriores no era necesario. En Asturias y Cantabria, además, ni la aplicación para teléfonos ni la web permiten adquirir el abono; por una limitación tecnológica aquí hace falta un billete físico que, según la compañía, se debía despachar en taquillas y máquinas.

Álvarez llegó a la estación de Sanz Crespo para enfrentarse al procedimiento y tropezó con nuevos matices. Hizo cola durante diez minutos ante la ventanilla y el personal de taquilla le dijo que no, que fuera a la máquina. Después cola en la máquina autoventa, pero tampoco. Esa máquina solo despacha billetes de ancho métrico (Feve), así que tuvo que buscar la de ancho ibérico (Renfe). Tras quince minutos logró el abono y empezó a auxiliar al resto de clientes que se acercaban cargados de dudas e interés. «Cuesta un poco enterarse de cómo es todo esto, pero yo hasta ahora pagaba 72,5 euros al mes y me los voy a ahorrar», comentaba.

«Yo vivo en Avilés, viajo en tren de Renfe a Oviedo a trabajar, pero alguna vez cojo el Feve a Gijón. Entonces, ¿tengo que comprar dos abonos distintos?», le preguntó estupefacto otro usuarios. Desde 2013, Feve y Renfe son la misma empresa; en la máquina autoventa de Feve, de hecho, el anagrama que aparece es el de Renfe. Sin embargo, pese a haber pasado nueve años integradas en la misma sociedad, ambas divisiones mantienen sus tarifas, ventanillas y sistemas diferenciados. El abono gratuito que se saca para la red de Renfe no vale en la de Feve y viceversa.

Más confusión. La web de Renfe que informa de los abonos gratuitos segmenta las explicaciones en cuatro apartados: cercanías, media distancia, media distancia de alta velocidad y ancho métrico. El viajero de cercanías de Feve queda así tentado a seguir la primera opción si nadie le aclara que en la web lo relativo a Feve se explica evitando el nombre de la extinta empresa y optando en su lugar por el tipo de vía que utilizan esos trenes, esto es, el ancho métrico. Francisco José García no se percató de la diferencia entre las máquinas autoventas de Renfe y Feve y salta de una a otra, durante diez minutos, hasta desistir: «Vine porque empezaba la promoción y creo que a partir del 1 de septiembre, cuando se puedan usar los abonos, se va a liar; llevo intentándolo con distintas tarjetas de Renfe&Tu, y no lo consigo. Volveré mañana».

El sistema es engorroso, pero el resultado merece la pena. Es la sensación con la que se va, abono en mano, Victoria Martín. «Vivo en Gijón y tengo huerta en Las Segadas. Me gastaba 20 euros al mes en tren, pero ahora que es gratis voy a ir a más a menudo», cuenta. «Me viene genial, estudio en Llamaquique Magisterio y gastaba 65 euros al mes en transporte, la única pega que le pongo a esto es que podían mantener el sistema hasta que acabe la Universidad», confía Laura Rivas.

El abono funcionará del 1 de septiembre al 31 de diciembre, si bien el Gobierno se abrió ayer a ampliar el plazo. El único requisito es pagar una fianza que se reembolsará si el cliente hace más de 16 viajes en los cuatro meses de la promoción. Eso sí, el billete es personal e intransferible, es decir, no lo puede utilizar para sumar viajes otra persona.

En el caso de las cercanías, la fianza es de 10 euros y permite moverse por todas las líneas de ancho ibérico (C-1, C-2 y C-3) o de métrico (C-4, C-5, C-6, C-7, C-8 y C-9); para alguien que se desplace entre Oviedo y Gijón por ejemplo sería rentable con solo tres usos y perdiendo el dinero de la fianza. En el caso de los trenes regionales de las líneas a Cantabria, Galicia, León y Valladolid la garantía es de 20 euros, con devolución también desde el cuarto viaje. Eso sí, este abono solo permite moverse entre las dos estaciones que haya escogido por el viajero. Para facilitar la devolución, la empresa aconseja pagar con tarjeta, y así el dinero se devolverá a la cuenta. Caso contrario habrá que pedirlo en taquilla.

Renfe reforzó su personal de información en las estaciones, aunque los que están en formación no disponen de indumentaria identificativa.