La rampa de Pajares reabre tras más de 61 horas de corte y 2.904 pasajeros sin tren

El Ministerio de Fomento lleva más de 3.000 millones invertidos en la variante de Pajares para acortar en unos 45 minutos el tiempo de viaje ferroviario con la meseta, pero también evitar que esa conexión quede suspendida, como ha vuelto a ocurrir. Desde las 19.58 horas del sábado hasta las 9.10 de ayer la rampa de Pajares quedó vetada a los servicios de pasajeros. Son 61 horas y 12 minutos de corte, lo que afectó a 2.904 pasajeros y 33 trenes de largo recorrido y media distancia. Renfe fletó de urgencia autobuses para que sus clientes pudieran completar por carretera el tramo.

La incidencia se suma a la de febrero, cuando la rampa cerró seis días. Ambos problemas hacen ya del presente el peor año en cortes de tráfico ferroviario por el puerto, al menos desde 2010, y evidencian de nuevo la conveniencia de abrir la variante.

El trabajo de las cuadrillas de Adif estos días ha sido notable, pues han tenido que retirar más de una veintena de árboles caídos sobre la línea aérea de contacto en todo el puerto, lo que confirma las críticas de los ferroviarios que llevan meses advirtiendo contra el escaso trabajo que se estaba realizando con la vegetación que crece en los márgenes.

Además de la caída de árboles, los trabajadores de Adif han luchado estos días con acumulaciones de nieve de hasta sesenta centímetros sobre el carril.