Canga: «Con el PSOE el tren está perdiendo toda la velocidad»

Primero, por unos planes (el transbordo en bus) que harían perder el ahorro de tiempo que permitirá la nueva infraestructura y después porque la propia apertura de la variante se retrasa y no abrirá en mayo, que era el plazo prometido para su estreno. Mientras que, en el primer caso, Adif ha tenido en cuenta la posición del presidente del Principado de buscar todas las fórmulas para evitar el cierre, en el segundo las pruebas de seguridad obligan a que la apertura se demore y se sitúe entre los meses de julio y septiembre.

La diputada nacional del PP, Paloma Gázquez, ya había manifestado el viernes que «viendo el tiempo que duraban las pruebas en otros territorios y llevan el tiempo que llevan, ya sabíamos que el plazo era mentira y no se ajustaba a la realidad». Y el secretario general del PP asturiano, Álvaro Queipo, calificó de «auténtica chapuza organizativa» los planes de cerrar los fines de semana. «Urge el ancho internacional y ni siquiera eso está sobre la mesa».

También los representantes sindicales se refirieron al retraso. Mientras que el secretario general de UGT, Javier Fernández Lanero, reconoció la «decepción» por la nueva demora, consideró que «hay que hacerlo en plenas condiciones de seguridad. No vale hacer política ni bromas con eso, porque nos jugamos mucho». Su homólogo de CC OO, José Manuel Zapico, apuntó que «es una 'cuestión de Estado' para Asturias y hay que defenderla como un solo equipo, remando todos en la misma dirección».