«Las pruebas dan lo que dan», alega Delia Losa sobre el archivo del crimen de Sheila Barrero

«Todo el mundo, tanto las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado como la administración de justicia tiene el interés de concluir todos los expedientes abiertos», especialmente en «un crimen tan execrable con este», comentó Losa, quien hace semanas calificó de «concluyentes» las pruebas recogidas en el informe de la Guardia Civil elaborado tras revisar con las técnicas actuales las pruebas recogidas en el lugar del crimen.

El ministerio fiscal considera que las nuevas diligencias practicadas para intentar esclarecer los hechos no permiten realizar una acusación formal contra su exnovio, única persona investigada por el crimen. El informe redactado por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil recoge que no se puede determinar que los residuos de disparo que había en un casquillo encontrado en el coche de la víctima y los hallados en una mano del sospechoso, aficionado a la caza, pertenezcan a un mismo cartucho. Tampoco se ha podido acreditar que estuviera fuera del domicilio cuando ocurrió el crimen.

Sheila Barrero, de 22 años, fue asesinada el 25 de enero de 2004 cuando regresaba a su domicilio familiar en Degaña tras finalizar su jornada como camarera en un pub de Villablino (León). Apareció con un tiro en la cabeza en el interior de su coche. La causa se archivó en 2008 y se reabrió hace dos años.