El Principado se suma a la patronal y exige llegar en AVE a Madrid antes de las 9.30

Confirmó que el 1 de marzo Renfe pondría a la venta la nueva cartelera de conexiones con Madrid («y si me equivoco es por algún día arriba o abajo») y se hizo eco de la demanda del empresariado de lograr una conexión que le permita llegar a Madrid a las 9.30 a más tardar. Para acercarse a ese objetivo especificó que el primer servicio de la mañana sería un AVE, con salida de Gijón a las 6.26, indicando que sería el segundo más madrugador «de la península» y que no se podía adelantar más por las labores de mantenimiento de la red. Con las estimaciones que maneja Renfe ese tren madrugador llegaría a Madrid alrededor de las 9.47.

La realidad es que los trabajos de mantenimiento en la línea Gijón-Madrid concluyen a las 5.00 como muy tarde, hay siete servicios AVE circulando por España entre las 5.30 y las 6.20 y un mercancías accediendo a la infraestructura de alta velocidad de la variante de Pajares a las 5.43. En medios ferroviarios se asume que el ministro tuvo un lapsus en su intervención.

Este periódico detalló ayer esa realidad y demostró que hay diez servicios AVE y AVLO en todo el territorio con horarios que les permite alcanzar Madrid antes de las 9.30. Tras conocer esa realidad las cartas se han vuelto a barajar.

Fuentes del Gobierno regional reafirmaron «la necesidad» de que la nueva cartelera «incluya un servicio que garantice la llegada a Madrid antes de las 9:30 de la mañana. Hemos trasladado esta exigencia al ministerio y se nos ha asegurado que se realizarán los ajustes pertinentes para facilitar dicha llegada».

El propio ministerio reajustó su mensaje. Renfe, la empresa encargada de los trenes, salió a matizar que los horarios publicados «no son oficiales ni definitivos. Es una primera propuesta sobre la que se sigue trabajando». Según especificó, está «realizando un estudio de mercado para conocer la potencial demanda del servicio de alta velocidad entre Asturias y Madrid y, así, ajustar los horarios a las necesidades de movilidad de la sociedad civil». «La oferta del servicio de alta velocidad de Renfe responderá a la demanda del mercado y a las posibilidades técnicas de la vía; es decir, si de los resultados del estudio surge la necesidad de iniciar los servicios muy pronto, se pondrá un tren lo más temprano posible».

El lapsus del ministro dio munición a la oposición para cargar y reclamar un tren más madrugador. Álvaro Queipo, presidente del PP, acusó a Puente de visitar la región para hacerse fotos pero sin aportar soluciones «a las peticiones del empresariado para las cuestiones de los horarios». «El ministro ha mentido bien por desconocimiento o por falta de compromiso real con los empresarios asturianos», terció Carolina López, de Vox.

IU-Convocatoria ve «margen para poder adelantar esa entrada en la estación de Chamartín entre las 9 y 9:30» y pide «estudiar» la opción de poner un tren lanzadera a León para trasbordar al primer AVE de esa ciudad. «El ministro nos mintió sin rubor para callar las quejas», lamentó Adrián Pumares, de Foro. «Nos parece una falta de respeto», coincidió Covadonga Tomé, diputada elegida por Podemos.