El Principado, sobre la reapertura: «Seríamos unos irresponsables si lo hiciésemos»

La portavoz del Consejo de Gobierno, Melania Álvarez, inició ayer la rueda de prensa semanal con un mensaje de prudente optimismo: «La incidencia se está controlando y la curva se doblega, lo que demuestra que las duras restricciones están dando resultado». De hecho, y al contrario que con los cierres perimetrales, la portavoz subrayó que los de la hostelería «están funcionando» para contener la propagación del virus. Por ello, y repreguntada por la apertura de estos locales, añadió que «seríamos unos irresponsables si lo hiciéramos». Para un cambio de criterio habrá que esperar. Al menos, hasta el miércoles, día en el que se reunirá nuevamente el comité de crisis del Ejecutivo. «Ese día se podría aprobar una flexibilización del cierre en función de la evolución epidemiológica», avanzó Melania Álvarez. Sobre el cómo, no dio más pistas aunque recordó tres indicadores: la tasa de positividad en el 5% -objetivo que ya se cumple-, que la ocupación hospitalaria baje al 15% y la específica de las UCI, al 25%. Hasta entonces, pidió «no engañarse» y «asumir la realidad tal y como es». Respecto a las protestas del sector hostelero, Melania Álvarez afirmó que «el Gobierno comprende y respeta las protestas, siempre que estas no sean violentas».

Otra de las preocupaciones de estos días y sobre las que el Principado deberá de pronunciarse con medidas a corto plazo es la forma de afrontar las celebraciones navideñas. Melania Álvarez recordó que se está trabajando en el marco del Consejo Interterritorial sobre un documento que aúne los criterios de las diferentes comunidades autónomas pero que, llegado el momento, «perfilaremos las medidas concretas para la aplicación en Asturias y que se adecuen a nuestra situación».

Entre ellas está, además de la hostelería, sí avanzó que se mantendrá el cierre de la comunidad autónoma tanto para entradas como salidas. Lo que queda por definir es la forma en que se controlarán esos accesos y qué definición se hará para aquellos que, en el borrador del Gobierno central, se citan como «allegados».